El descontento creciente y generalizado en algunos sectores estudiantiles de la Universidad de La Laguna es cada vez más evidente. De hecho, parte de esta frustración de ciertos colectivos universitarios se está canalizando a través de acciones concretas y organizadas en respuesta, principalmente, a la gestión de la docencia durante la crisis sanitaria de la Covid-19 por parte del equipo de gobierno de la Universidad.
En particular, la Plataforma de Estudiantes de Tenerife inició hace dos semanas una campaña de pegada de carteles por las calles de San Cristóbal de La Laguna, bajo el nombre #VergüenzaULL. Estos carteles son el resultado de una intensa crítica a la gestión rectoral a través, principalmente, de las redes sociales desde el nacimiento de la Plataforma, a finales de verano.
Datos, cifras y testimonios
Los carteles recogen mensajes en los que se exponen datos y cifras que ponen de manifiesto «la nefasta, negligente e irresponsable» gestión de la Universidad, según esta Plataforma. Así, se denuncia que «la tasa de abandono de los estudios del alumnado de la ULL es del 45 %» o, por ejemplo, que «en 2019, la tasa media de los docentes titulares de la ULL estaba en 56 años». Estos datos suelen ir acompañados de las exigencias y críticas que se realiza desde la Plataforma. En este sentido, la organización asamblearia del estudiantado afirma que «cuando (el abandono de los estudios) es un problema tan generalizado, lo que falla es la Institución», al tiempo que exige «una renovación de plantilla».
Asimismo, la Plataforma de Estudiantes de Tenerife ha creado carteles en los que se recogen testimonios del alumnado afectado por la situación de docencia virtual y que denuncia su situación a través de Twitter. Las octavillas recogen tweets en los que se exponen las dificultades que conllevan estudiar en casa. «En mi casa me resulta imposible estudiar» o «en mi casa no tenemos wifi ni ordenadores» son algunas de las afirmaciones más repetidas que denuncia la Plataforma en su campaña.
Uno de los asuntos que más revuelo ha generado en Twitter -medio por excelencia para la crítica de la gestión de la rectora Rosa Aguilar y su equipo desde el inicio de la pandemia- ha sido el incumplimiento del acuerdo que firmaron, el 20 de abril de este año, la ULL y el Gobierno de Canarias para la exoneración del pago de las segundas y sucesivas matrículas.
En relación con este asunto, la Plataforma de Estudiantes de Tenerife asegura que esta situación «es gravísima», al tiempo que asegura que «deja en situación de desamparo a miles de alumnos y alumnas que ya atravesaban situaciones precarias». Además, a través de los carteles, la Organización asevera que «incumplieron su acuerdo dejando a cientos de estudiantes desamparados». Asimismo, sentencia que «aparte de largas por parte de la ULL, no ha habido ninguna solución efectiva. Cosa que todo el mundo puede comprobar».
«Una mejora sustancial y tangible de la situación»
Por su parte, según explica la Plataforma, cualquier persona puede suscribirse a la campaña «descargando y pegando los carteles». De hecho, desde la cuenta de la Plataforma de Estudiantes de Tenerife en Twitter, se puede acceder libremente a una carpeta compartida en Google Drive, en la que se puede descargar el material de la campaña. El objetivo más importante de la campaña es conseguir «una mejora sustancial y tangible de la situación».
La Plataforma, que no descarta emprender otras iniciativas en aras de mitigar la «mala gestión» de la ULL, ha establecido otros propósitos como «conseguir el reembolso de las segundas matrículas y sucesivas, paliar la brecha digital, o garantizar espacios de estudio al alumnado que no puede seguir con normalidad la docencia virtual».
Por último, desde la Plataforma se congratulan del éxito que han tenido sus iniciativas y campañas. En este sentido, desde la Plataforma aseguran que «tienen el apoyo del alumnado de la ULL, ya que se puede comprobar por el feedback siempre positivo y abundante en redes».