Terror y comedia se alían para llevarte hasta el cine este fin de semana. Hablamos de tres propuestas muy diferentes entre sí y producidas en diferentes lugares del globo. El miedo se materializa en Annabelle vuelve a casa, la nueva entrega protagonizada por la espantosa muñeca. Esta vez, despierta a los espíritus de la sala de objetos encantados del matrimonio Warren. Juntos toman como objetivo a la hija de estos y a sus pequeñas amigas de 10 años de edad.
Este capítulo supone el debut en la dirección de Gary Dauberman, guionista de las dos películas anteriores, con la producción de James Wan, que llevó la batuta de la saga original. Vera Farminga y Patrick Wilson vuelven a encarnar al matrimonio Warren, que no aparecía en las salas desde La monja. Por otro lado, la joven Mckenna Grace es la encargada de dar vida a la hija de Ed y Lorraine. Esta pequeña actriz está familiarizada con el género, pues ha participado en historias de este tipo, como la serie La maldición de Hill House.
La propuesta patria de la semana llega envuelta en risas y de manos de la argentina Marina Seresesky. Lo nunca visto cuenta las vivencias de los vecinos de Fuentejuela de Arriba, una aldea que, según Teresa, se está apagando. En medio de este clima de desesperanza, aparecen en el pueblo un grupo de africanos que huyen de una situación de engaño y explotación. Así, la protagonista decide ocultarlos con ayuda de Jaime y el «Guiri», creyendo que son la solución que la localidad necesita. Carmen Machi encabeza el reparto de esta aventura que cuenta, también, con otros como Pepón Nieto, Kiti Manver o Jon Kortajarena.
Una historia real llegada desde la India
En la cartelera de esta semana también tiene cabida un drama biográfico. Hablamos de Super 30, un filme indio que cuenta las proezas del matemático Anand Kumar. Hrithik Roshan y Mrunal Thakur son los intérpretes principales y están dirigidos por Vikas Bahl, que se encarga, también, del guion.
La cinta sigue la vida de este genio que, en un ejemplo de altruismo, creó un programa educativo, Super 30, que pretendía ayudar a los niños de familias desfavorecidas con aspiraciones respecto a su formación. Además de prepararlos para el examen de ingreso al Instituto de Tecnología de la India, les proporcionó casa y comida. Esto hizo que pudieran acceder a reconocidos puestos de trabajo y posiciones de responsabilidad en investigación científica.
