Entre todo este contenido se incluye cine en familia, cuentos infantiles y talleres variados. Destaca el acuerdo con la plataforma de distribución de cine Filmin, una soporte cinematográfico en línea que ofrece en su mayoría cine de autor o independiente, pero también algunos títulos de cine comercial.

De la misma manera, el proyecto Club de lectura Venecia, tenía prevista su inauguración días antes de que se decretara el estado de alama, sin embargo, no se pudo hacer. Por ello, esta propuesta también se ha trasladado al formato web. Esta intenta explorar las relaciones entre artes plásticas y literatura, a partir de selecciones de textos desde los que dialogar, relatos, novelas cortas, poesía y cómic.

La cuarentena ha incrementado las ganas por la cultura

«Al principio del confinamiento, se creó una especie de estado de shock y pánico, hubo una avidez por consumir contenidos culturales y de entretenimiento. La gente se ha serenado y los propios centros e instituciones hemos tomado nota de la realidad», cuenta David Calzado Carmona, jefe de comunicación de La Casa Encendida.

Lo cierto es que llevaban tiempo pensando en crear programación online, pero con motivo de la irrupción del virus, todo se ha acelerado. Mantienen que la experiencia física, personal y de contacto directo con lo artístico va a seguir siendo fundamental, y aunque la cancelación de eventos y exposiciones aún sean razones de preocupación, no pierden la esperanza.