El Campus de Verano 2024 contará con un servicio profesional, enfocado tanto en la parte deportiva y lúdica, como en la salud física y mental. Contará con la participación de especialistas y deportistas del Club. A parte, el Campamento dispondrá de servicio de comedor con un menú sano y equilibrado. También se entregarán camisetas conmemorativas del Campus y se recomienda llevar gorras y protección solar para poder disfrutar al máximo de la experiencia.

Las diferentes actividades lúdicas – deportivas que se llevarán a cabo son: atletismo, escalada, juegos en tatami,  ultimate,juegos tradicionales  juegos con raqueta, tiro con arco, entre otras que tendrán lugar en el campo de fútbol, la sala de tatami y los múltiples espacios deportivos de la Universidad.

Macarena Chico Díaz, responsable de RRII y nuevos proyectos del Club de Atletismo Tenerife CajaCanarias, apunta que «el objetivo primordial de nuestro campus es que quienes participen en él, se diviertan y aprendan en un entorno saludable para su desarrollo personal, físico y mental». También añade que «la conjunción de actividad física y alimentación sana y equilibrada será nuestra piedra angular en el trabajo diario de nuestro equipo, sin olvidarnos y teniendo siempre presente los valores positivos, como la solidaridad, la confianza, la cooperación, la empatía y el respeto personal y colectivo».

¿Cómo fueron sus comienzos en el atletismo? «Cuando iba al colegio la actividad extraescolar en la que estaba apuntada era gimnasia rítmica, pero mis amigas hacían atletismo. Los días que yo no iba a gimnasia mi familia me dejaba en la biblioteca, hasta que un día me fugue y fui a atletismo con mis compañeras».

¿Qué le hizo decantarse por ser lanzadora de disco? «Justo el día que fui con mis amigas estaban haciendo lanzamiento de disco y yo me anime a entrenar con ellas.  El monitor me dijo que podía ir el fin de semana a una competición para ver si estaba interesada en este deporte. Yo empecé a entrenar en el colegio, hasta que en tercero de la ESO me hice la ficha federativa. Ese mismo año quede tercera de España cadete e hice récord de Canarias, ahí fue cuando realmente me di cuenta que me gustaba lo que estaba haciendo».

¿Cree que se le da la suficiente importancia a este deporte? «No, el atletismo ya de por sí es un deporte bastante minoritario, en comparación con el futbol, el baloncesto o incluso el balonmano. Dentro del atletismo, las personas de lanzamiento somos inexistentes, solo hay que mirar los horarios de las competiciones o directamente ni nos las ponen. También pasó una vez en un campeonato de España que no salió mi categoría en el directo. Solo retrasmiten salto de longitud, carreras, salto de altura y los lanzamientos los ponen solo cuando tienen algún hueco».

¿En cuántos campeonatos ha participado? «En muchos, desde 2016 he estado en todos los campeonatos de España de verano de aire libre, incluso estaré en el de este año, que es dentro de dos semanas. También he competido en los de invierno. Para mi los más importante en los que he estado fueron los dos del año pasado, porque en mi categoría quede campeona de España por primera vez y luego en el Absoluto, que gane la medalla de bronce».

¿Cuál ha sido su mejor marca? y cuando las cosas salen como esperas, ¿de quien te acuerdas? «Mi mejor marca de este año fue en el Campeonato de Canarias Sub18 y Sub23 Aire Libre, con un lanzamiento de 46.54 metros y con un disco de un kilo. Y en 2021 fue 49.74 metros, con la que conseguí el tercer puesto en Getafe. Cuando las cosas me salen como espero me acuerdo de la Emma del pasado. Nunca me imagine llegar hasta donde estoy a día de hoy».

¿Cuánto tiempo le dedica a los entrenamientos semanalmente y cómo lo compagina con los estudios? «Mi prioridad siempre ha sido el deporte, por eso mismo no he cursado una carrera universitaria. Yo entreno a la semana entre cinco y seis días. Me dedico todas las tardes a estar en la pista. Actualmente estoy cursando mi segundo grado superior en prótesis dental. Como no tengo mucho tiempo para estudiar, aprovecho los ratos libres en clase para adelantar tarea o para repasar para algún examen».

¿Qué le gustaría conseguir como deportista? «Creo que a cualquier deportista le gustaría llegar a competir en los Juegos Olímpicos y esa es mi mayor meta. Pero para mi  ya con vestir la ropa de la selección española sería todo un sueño. Nunca digas nunca, quien sabe lo que pasará el día de mañana».

Dio sus primeros pasos en el Club Atletismo Olímpico de Tegueste con 7 años practicando todo tipo de ejercicio, especialmente fondo/medio fondo. A los 14 años inició en la marcha tras la llegada de un nuevo entrenador al equipo. «En esta categoría fue mi primera gran competición a nivel nacional: finalicé noveno en 5 kilómetros marcha en el torneo de España cadete por comunidades autónomas del 2008», destaca el atleta.

Al año siguiente fichó por el CEA Tenerife, donde estuvo tres temporadas. Con el club lagunero consiguió participar en el Campeonato de España de clubes de segunda división en Mataró en la temporada 2009/2010. «Una vez fui al torneo no pensé que podría ir a otro, yo solo quería disfrutar de lo que hacía», asegura. Consiguió plaza en el LXXIX campeonato de España de marcha en ruta y veteranos en Santa Eularia des Riu (Ibiza, 2010) siendo juvenil, donde acabó décimo batiendo el récord de Canarias en aquel momento de 10 kilómetros en ruta que ostentaba Basilio Labrador, el marchador más laureado de Canarias, quien fue 19 veces internacional con la selección española de atletismo y galardonado en dos ocasiones como mejor deportista de la provincia de Santa Cruz de Tenerife.

«Lo que me funcionaba, que era disfrutar, se convirtió en una obligación»

El marchador afirma que pasó por momentos de declive aunque nunca meditó en dejarlo: «Lo que me estaba funcionando, que era disfrutar, se convierte sin querer en una obligación, y por tanto, te sientes frustrado». No se ha planteado una fecha para retirarse, aunque asegura que su próximo objetivo es ir a un Campeonato de España la próxima campaña. A partir de ahí tomará la decisión de apartarse, ya que las necesidades le obligan a buscar una salida laboral en otro ámbito. Además, dice que no se puede vivir del atletismo a menos que seas velocista debido al marketing en el que está inmerso esta disciplina.

David Reyes considera que el nivel de marchadores de Canarias es bueno, aunque hay poco apoyo por parte de la Federación y de los clubes. «La poca exigencia de los jueces en las competiciones y la indisciplina generan que los resultados de los atletas sean engañosos respecto al balance nacional», procura.

La carrera deportiva no se desarrolla sin la figura de un entrenador, quienes son la parte más importante de un deportista, no solo en su preparación física, sino también en lo psicológico. «Tienes que tener una relación muy íntima con él y ser la persona que más te conozca y te entienda», dice Reyes.

Por otra parte, es monitor en el club teguestero, donde ha prosperado en esta faceta inculcando valores de compañerismo y sobretodo de respeto. En este ámbito tiene como meta ganar una reputación, que sus atletas tengan como objetivo ir a una campeonato nacional y que sea considerado como un técnico serio y exigente. «Soy partidario de que cada atleta tiene que escoger entre lo que le gusta y lo que se le da bien, el entrenador debe aconsejar para llegar a un consenso», expresa el instructor. No obstante, expresa que su propósito principal es seguir disfrutando y transmitir confianza a sus pupilos.

¿Qué significa el atletismo para ti? “El atletismo significa todo. Te condiciona completamente. No obstante no puedo quejarme. Me considero un privilegiado porque no he tenido que renunciar a grandes cosas por el deporte. Quizás sea porque las cosas a las que he renunciado no me parecían tan grandes”.

¿Cómo empezaste en el mundo del  atletismo y quién fue tu inspiración? “La primera vez que supe lo que era el atletismo fue al ver a la gran Ruth Beitia por televisión. Desde ese momento quise dedicarme al salto de altura. Justo cuando me enteré de que en mi colegio se podía practicar este deporte, tuve las primeras noticias sobre un tal Simón Siverio, amigo de mi hermano, que, por una casualidad de la vida, comenzó a saltar altura. Para sorpresa de todos se le daba tremendamente bien. Así que podría decir que la misma persona por la que sigo aquí es la misma que me metió de lleno en esto”.

«Me resulta casi imposible estudiar sin entrenar al mismo tiempo»

Has disputado varios campeonatos de España. ¿Cómo compaginas los estudios con los viajes a la hora de competir? “El hecho de tener tiempo limitado te sirve para aprender a priorizar y organizarte bien, hasta el punto de que si falta uno de los dos pilares (o estudios o deporte) el otro pilar no funciona adecuadamente. Me resulta casi imposible estudiar sin entrenar al mismo tiempo. De igual forma me resulta muy complicado entrenar si no he ido a clases. No solo tengo la mente ocupada en el deporte”.

¿Recibes ayudas por parte de la Federación para viajar o te costeas tu mismo los viajes, estancia, comida, etc? “En atletismo, a diferencia de otros deportes individuales, tenemos la suerte de que los clubes suelen hacerse cargo de los viajes. Mi club no solo se hace cargo de los desplazamientos, sino que también corren con los gastos de estancia, dietas, etc”.

¿Por qué salto de altura y no otra modalidad dentro del atletismo? “Elegancia, técnica y espectáculo. Así defino el salto de altura y por lo que creo que me gusta tanto”.

Formaste parte de las filas del Club Atletismo Olímpico de Tegueste en tus inicios. ¿Crees que se trabaja bien a los jóvenes? ¿Con qué objetivo? “Sin duda alguna. Tegueste, a pesar de no contar con instalaciones adecuadas de momento, dispone de gente que sabe cómo tiene que trabajar con los más pequeños. En mi caso particular, en este conjunto no solo aprendí cada modalidad, sino una serie de valores que hoy día me acompañan. Me enseñaban a divertirme con el deporte, independientemente de ganar o perder”.

«Es imposible pensar en mi nivel actual sin la ayuda de Simón Siverio»

Entrenas con uno de los mejores deportistas de las islas actualmente, Simón Siverio, campeón de España e internacional absoluto en salto de altura. ¿Recibes consejos por su parte? “Tengo la grandísima suerte de entrenar con él. Es imposible pensar en mi nivel actual sin la ayuda de Siverio durante todos mis años de carrera deportiva. Sin duda alguna, es la persona con la que más tiempo comparto en la pista y sin él probablemente mi ilusión por este deporte se habría esfumado hace mucho tiempo”.

¿Crees que el atletismo está menos valorado que otros deportes por parte de los medios de comunicación? “Eso está clarísimo. Solo tienes que poner el telediario durante una semana y contar cuántos segundos le dedican a estas disciplinas. No obstante, no me importa que así sea, no pretendo hacerme famoso ni rico con el atletismo, simplemente quiero seguir disfrutando como el día en el que empecé”.

¿Dónde te ves en un futuro? “Es muy complicado responder a esa pregunta. Pero puedo decir que en un futuro me veo dejándome la piel en cada entrenamiento como lo he hecho hasta ahora”.

¿Un sueño? “Por suerte tengo demasiados. Me cuesta decantarme por uno solo”.

¿A qué edad comenzaste a practicar este deporte y cuál ha sido tu experiencia dentro de él? «Empecé en el conjunto Clator Orotava desde los cuatro años hasta los trece, que fue cuando el Tenerife CajaCanarias me acogió como parte de su familia y con quien actualmente permanezco. He formado parte de la selección canaria de la categoría que pertenecía en su momento y también con la categoría absoluta. Además, he competido en campeonatos a nivel nacional desde que era cadete y en División de Honor con mi actual equipo. Este deporte genera a la vez, amor y odio. Necesita mucha voluntad y sacrificio, pero está claro que, si te gusta como a mí, haces lo que haga falta para obtener los resultados que deseas».

¿Qué fue lo que te adentró en el atletismo? «Desde pequeña estaba todo el día corriendo y mi abuelo aconsejó a mis padres que me apuntaran en el club de mi municipio para que corriera en aquella pista. Después con los años me di cuenta de lo que me proporcionaba este deporte. Es cierto que es un deporte individual, pero el apoyo de tu gente y pertenecer a un club a veces convierten esta actividad en un deporte grupal».

Desde la ULL se ofertan diferentes actividades deportivas para los integrantes de la comunidad universitaria. ¿Crees que deberían incluir las diferentes modalidades de atletismo? «Como universitaria y atleta estimo que sería tremendamente beneficioso que existiera esa integración, tal y como se hace en Estados Unidos por ejemplo. Es importante que los estudios y el atletismo vayan de la mano, así el estudiante podría estudiar su carrera y compaginarla con las exigencias del entrenamiento de un atleta de alto rendimiento. Esto ayudaría a muchos atletas a no abandonar el deporte y acabar sus estudios».

¿Puedes compaginar bien la práctica del deporte con la vida académica y personal? «Me he matriculado en la mitad de asignaturas (matrícula parcial), ya que me resultaría complicado compaginarlo de forma óptima si cogiera la totalidad de asignaturas. Y respecto a la vida personal siempre hay huequitos para pasar buenos momentos con los amigos y la familia».

“Mi día a día está organizado en torno a los horarios de los entrenamientos y fechas de competición»

¿Crees que el atletismo es un deporte que está socialmente menospreciado? «No considero que el atletismo esté poco valorado con respecto a otras disciplinas, teniendo en cuenta que es lo más visto en los Juegos Olímpicos, pero sí es cierto que no se le da la misma importancia que a otros más mediáticos».

¿Qué sientes cuando has entrenado con bastante sacrificio y consigues unos buenos resultados en competición? «No sabría cómo describir las sensaciones que me embargan en un momento así. Sientes plenitud, alegría, satisfacción después de tanto entrenamiento y haber superado tus objetivos. Todo esto te da más ganas de continuar y seguir luchando y una mayor motivación para alcanzar nuevos objetivos».

¿Cuál ha sido la competición de la cual estás más orgullosa y que has aprendido de ella a nivel deportivo? «Tengo varios momentos de los cuales me siento orgullosa, pero uno de los momentos que más recuerdo sería cuando conseguí la mínima absoluta para el Campeonato de España siendo juvenil, porque eso me hizo pensar que todo lo que te propongas con trabajo llega. Además de ser muy emocionante saber que puedes competir con los mejores a nivel nacional».

«Sientes plenitud, alegría y satisfacción después de tanto entrenamiento y haber superado tus objetivos»

¿Qué representa el atletismo en tu vida? «Vamos a decir que el atletismo lo representa todo, ya que mi día a día está organizado entorno a los horarios de entrenamientos y fechas de competición».

¿Tienes alguna superstición cuando compites? «No soy muy supersticiosa, pero suelo competir con un mineral o a veces me pongo una prenda que había llevado puesta en una competición anterior si he obtenido buenos resultados con ella».

¿Qué tiene el atletismo que otros deportes no? «El atletismo es la base del deporte. Es una disciplina que, a mi parecer, exige un mayor esfuerzo mental y físico, que en otros deportes como el voleibol, el fútbol o el balonmano. Me gusta que al atletismo haya que dedicarle mucho tiempo y sacrificio si se quiere llegar lejos. Es lo que lo hace más grande».

¿Proceder de una isla menor hace que cueste más hacerse un hueco en el panorama deportivo? «Creo que sí, aunque depende de la situación y de otros factores como tu nivel deportivo o tus capacidades físicas y competitivas. Pero sí que cuesta un poco, sobretodo porque te encuentras con dificultades en el camino como pueden ser los traslados de una isla a otra, que es raro que te los financien, salvo que sea un campeonato importante».

«Me cuesta bastante compaginar los estudios con mi vida social y los entrenamientos»

Has logrado muy buenos resultados durante tu carrera como atleta. ¿Qué campeonato y/o medalla recuerdas con más cariño y por qué? «Me quedo con dos. El primer mejor recuerdo lo relaciono con la medalla de bronce del Campeonato de Canarias juvenil en 2013, en Las Palmas de Gran Canaria, porque fue la primera vez que disputaba la prueba de 100 metros lisos y, sorprendentemente, conseguí clasificarme para la final. Esto para mí fue muy importante, a la vez que inesperado. Y el segundo, lo vinculo a la medalla de plata que gané en el Campeonato de Canarias cadete y juvenil en 2014 al aire libre, esta vez en Santa Cruz de Tenerife. Competí en la modalidad en la que más destaco, los 200 metros lisos, y logré mi mejor marca personal hasta el momento, 22.75».

Cursar una carrera universitaria requiere mucho tiempo y dedicación. ¿Cómo afecta esa obligación a tus entrenamientos y a tu vida social? «Perjudica bastante, porque me ocupa mucho tiempo. El atletismo es un deporte al que hay que dedicarle muchas horas de preparación física y entrenamiento: es muy sacrificado. Me cuesta bastante compaginar esos tres elementos de mi vida, sobre todo ahora que he empezado a estudiar en la universidad y a entrenar una media de cinco días a la semana. Aún así, siempre trato de encontrar tiempo para salir con mis amigos o desplazarme a La Gomera para ver a mi familia».

«Soy de esas personas que prefieren marcarse un único objetivo»

¿Qué objetivos y metas persigues? «Aunque ahora mismo no me encuentro en mi mejor momento como atleta, siempre tengo en mi mente el propósito de mejorar y trabajar para poder conseguirlo. Ahora quiero centrar mi prioridad en progresar en mis marcas personales dejando las mínimas. Soy de esas personas que prefieren marcarse un único objetivo».

¿Qué consejo le darías a todos aquellos estudiantes que sueñan con competir en atletismo? «Les recomendaría que traten de ordenar su tiempo para poder disfrutar de todo, tanto del deporte como de la vida universitaria, sus familiares y amigos. También que se cuiden a sí mismos. Este deporte no se basa solo en acudir a los entrenamientos y competir, sino más bien en velar por tu cuerpo para evitar molestias y lesiones, llevar una dieta adecuada o descansar un número de horas pertinentes. Es muy complejo, pero como a todo en esta vida si se le pone ganas se puede. El que la sigue la consigue».

¿Estás obligada a acudir a todos los entrenamientos? «Al estar en un club de alta competición, que en el fútbol es equivalente a estar en Primera División, tienes un compromiso porque te están pagando la ficha. Uno tiene que estar ahí dadas las circunstancias y si vas a un campeonato vas con todas las exigencias que se te impongan».

¿Cómo ha afectado el deporte a tu vida social? «Mi vida social se ha visto influida… positivamente, porque mis amigas salen conmigo y lo comprenden. Además, es un tema de conversación interesante porque yo también puedo ayudarlas para que se enganchen al deporte y darles consejos de entrenamiento y alimentación».

¿El atletismo ha tenido un papel importante a la hora de eligir tu futuro profesional? «Mucha gente enfoca el deporte con un oficio y realmente no es así. Uno puede compaginar su vida cotidiana con la actividad deportiva, pero no necesariamente debe estar ligado. Yo escogí Relaciones Laborales porque es algo que me gusta de verdad. No todos los atletas están obligados a vincular deporte y trabajo. De hecho, creo que tampoco es muy sano obsesionarse todo el tiempo con la actividad física. Deporte es deporte y la vida profesional, vida profesional. Esa es mi humilde opinión».

¿La Universidad tiene ayudas para deportistas de élite? «Lo de las becas es un tema complicado porque el Gobierno no ayuda mucho. Las subvenciones suelen ser a atletas internacionales. A nosotros nos ponen carreras y con mucha suerte nos facilitan los viajes. La Universidad también organiza carreras de vez en cuando. Antes incluso costeaba campeonatos nacionales universitarios, pero hoy en día debes pagarlo tú y si quedas en posición de medalla te dan una beca».

«No es muy sano obsesionare todo el tiempo con la actividad física»

¿Qué representación tiene el atletismo en la comunidad universitaria? «Pues el Servicio de Deportes tiene la pista de atletismo a disposición. Si yo salgo de clase y me pilla de camino con el entrenamiento, cojo el tranvía desde Guajara y voy allí. Es un buen recurso en el que puedo apoyarme».

¿Cómo compaginas la vida universitaria con tu deporte? «Es más exigente. Son cinco asignaturas que te quitan mucho tiempo pero realmente lo llevo bien. Hay veces que no voy a clase pero con conciencia de que voy a llegar al examen y me lo he estudiado todo. Hay veces que entreno dos veces al día, por la mañana y por la tarde y eso quita mucho tiempo».

¿Qué consejo le darías a algún compañero tuyo para iniciarse en el deporte? «Que se apunte en algo que le guste porque es muy bonito, y que lo hagan como un proceso, es todo un aprendizaje. Esto no es empezar y llevar dos meses haciendo deporte con el cronómetro en la mano calculándolo todo y pesando la comida. Hay que olvidarse de todo eso y hacer las cosas a tu manera y con el apoyo de la familia, por supuesto».