Esta nueva investigación se trata de la primera llevado a cabo en España y en un Parque Nacional protegido con estas características. En estudios anteriores, el Grupo Investigador ha demostrado la presencia de microplásticos en sedimentos marinos y en el tracto digestivo de peces en Canarias. Los microplásticos son un material sobre el que se continúa investigando las consecuencias que pueden tener para la salud de las personas y el medioambiente.

Resultados

La investigación obtuvo muestras de nieve del Parque durante dos episodios de tormentas en enero y febrero de 2021. Se encontraron un total de 1 784 partículas en 63 muestras, la mayoría se trató de fibras de materiales celulósicos y poliéster presentes, en especial, en la ropa de invierno. Se evidenció una presencia de este material en zonas separadas de las rutas accesibles a la población. También se observó un aumento de microplásticos en las zonas accesibles una vez se habilitaban a la gente para la observación y el disfrute de la nieve.

El hecho de que se hayan encontrado microplásticos tras estas precipitaciones demuestra que este tipo de partículas se están depositando cada vez que tiene lugar un episodio de estas características, incluso también con la lluvia, con los consecuentes efectos que podrían tener sobre la fauna y flora del Parque Nacional.

Futuros estudios

En la actualidad, el Grupo de Investigación, está llevando a cabo estudios en suelos y excrementos de conejo del Parque donde están pudiendo constatar la presencia de estas microfibras. Queda pendiente establecer si están relacionadas con la deposición húmeda, producida por la nieve o la lluvia, o no.

Ante la escasa cantidad de información sobre la presencia de microplásticos en la nieve este estudio se presenta como uno de los pocos artículos científicos sobre la presencia de microplásticos en altitudes de zonas de islas oceánicas. El equipo investigador destaca la importancia del estudio de las microfibras halladas. Se podría tratar de un transporte a larga distancia, de cientos o miles de kilómetros, y también un transporte entre la población cercana.

¿Qué te impulsó a formarte en Ciencias del Mar? «Siempre me ha gustado el océano y los animales. Antes incluso de empezar la carrera ya tenía claro que quería estudiar Biología Marina y esa pasión por el mar es lo que me llevó a hacerlo».

¿ Y a dedicarte a la defensa del medioambiente? «El poder dedicarme a este tipo de proyectos tengo que agradecérselo a AChem, en especial a Javier Hernández Borges y  Cintia Hernández Sánchez que me dieron la oportunidad de incorporarme como investigadora para MICROSED con el que empecé mi trabajo en el equipo».

¿Cómo llegaste a la ULL? «Comencé en la ULL continuando con mi formación realizando el máster en Biología Marina Biodiversidad y Conservación y he podido quedarme a realizar mi tesis en un grupo de investigación reconocido y muy activo».

 ¿Cómo es tu tesis?  «Se titula «Contaminación por microplásticos en fondos marinos del Archipiélago Canario y sus efectos en los organismos bentónicos» dentro del programa Biodiversidad y Conservación del Medio Marino en la ULL.  He llevado a cabo muestreos de sedimento marino por las Islas».

«A través de estos trabajos intentamos aportar datos y tomar medidas»

¿Cuándo surgió Implamac?  «Implacac (Evaluación del impacto de los microplásticos y contaminantes emergentes en las costas de la Macaronesia) está liderado y coordinado por la ULL y por AChem, es un proyecto Interreg-MAC de cooperación en el que están implicados todos los archipiélagos de la Macaronesia. Este empezó en 2019 y continuamos trabajando en ello».

¿Qué actividades habéis hecho? «Hemos organizado Jornadas de Puertas Abiertas, cursos de Extensión Universitaria que implican clases teóricas y prácticas en el laboratorio natural Playa Grande. También hemos participado en ferias científicas como la XVI Feria de la Orotava o Ambiéntate en el parque García Sanabria en Santa Cruz de Tenerife e impartimos charlas en institutos y formamos voluntarios de Cruz Roja».

¿Y Microsed? «Se crea gracias a una propuesta de AChem y a la Fundación Diario de Avisos, la entidad financiadora. Microsed «Impacto de los Microplásticos en el ecosistema de los fondos marinos de Canarias» duró un año (Junio 2020 – Junio 2021) y se llevaron a cabo muestreos de sedimento marino en todas las islas. Se trata del primer estudio de este tipo en la zona. Este significa mucho para mi ya que fue mi primera experiencia como investigadora».

¿Por qué es tan necesario el cuidado del entorno? «Debemos cuidar la naturaleza. El bienestar humano depende de las buenas condiciones del mundo y su sistema. Es muy importante mejorar el conocimiento público en materia de contaminación incluyendo la sensibilización de la población, llevando a cabo acciones informativas, de aprendizaje y educación ambiental…»

La Química Verde es una disciplina que desarrolla rutas sintéticas o nuevos productos de forma respetuosa con el medio ambiente. Para ello se emplean procedimientos con reactivos o disolventes con un grado de toxicidad bajo. Según expone el doctor Javier Hernández, se incluyen todos aquellos procesos o reacciones de cualquier tipo que sean sostenibles y que estén, en última instancia, enfocados al análisis químico.

Los microplásticos están esparcidos por todos los compartimentos ambientales: medio marino, aire, suelos y biota. Dichas partículas, cuyo tamaño oscilan entre cinco milímetros y una micra, tienen la capacidad de poder adsorber y retener en su superficie una serie de contaminantes. De entre todos los estudios que existen sobre el impacto de estas partículas en los organismos marinos, Hernández destaca cómo en «algunos de ellos se reflejan las inflamaciones de tejidos, muertes de células o alteraciones del sistema reproductivo que pueden llegar a producir».

La aparición de estas partículas en nuestro entorno natural está directamente relacionada con una recogida inadecuada de residuos. El doctor en Química explica que esto podría deberse a “una incorrecta recogida de los plásticos, a las pérdidas de residuos durante la gestión de estos mismos y al escaso reciclaje de estos materiales”. El profesor titular en el Departamento de Química de la Universidad de La Laguna asegura que la solución para reducir la cantidad de estas partículas reside en la reducción de la producción y consumo de plásticos, el correcto tratamiento del material, la búsqueda de recursos alternativos y biodegradables.

El trabajo también ha sido coordinado por la profesora Cintia Hernández Sánchez, del área de Medicina Preventiva y Salud Pública, y han participado los doctores Carlos Cairós Barreto, Jessica López Darias y Javier González Sálamo, del Departamento de Química, y las graduadas Elisa Mazzetti y Clara Hernández-Álvarez, primera autora del trabajo.

Tras un estudio detallado de los fragmentos de microplásticos encontrados, de un tamaño entre 1 y 5 milímetros, y tras comparar el contenido en microplásticos con otras playas de Canarias previamente analizadas, como es el caso de la playa de Ámbar en La Graciosa, Famara en Lanzarote o Las Canteras en Gran Canaria, entre otras, se pudo constatar que en todas las playas, a excepción de Playa Grande (Arico), el contenido en microplásticos era relativamente bajo, inferior a 3.5 g/m² (con una media de 45 fragmentos/m²). Todas esas playas son catalogadas como «aptas para el baño» con lo que reciben limpiezas periódicas.

«No apta para el baño»

En el caso de Playa Grande, que era la única «no apta para el baño», el contenido era bastante superior, en torno a 99 g/m² (cerca de 3000 fragmentos/m²) que es relativamente alto y comparable con los recibidos en las playas de Canarias anteriormente mencionadas (Ámbar, Famara y Las Canteras) en ciertos periodos del año.

Además de su cuantificación, los autores del trabajo también identificaron mediante espectroscopía infrarroja el tipo de plástico de un buen número de dichos fragmentos: un 69 % eran fragmentos de polietileno (PE); un 18 %, de polipropileno (PP); y un 4 %, de poliestireno (PS). Todo ello concuerda con datos previamente publicados en la bibliografía y con el hecho de que los dos primeros son las dos formulaciones de plásticos más producidas a nivel mundial. Estos análisis fueron realizados en el laboratorio de Espectroscopía Infrarroja del Servicio General de Apoyo a la Investigación de la Universidad de La Laguna.

«Playa Grande recibe periódicamente cantidades importantes de basuras marinas y sobre todo de microplásticos. Este hecho no es novedoso, porque algunos de los usuarios habituales de la playa y vecinos de la zona nos han comentado que desde siempre la playa ha estado bastante sucia, si bien, hasta la fecha, el contenido en microplásticos no se había cuantificado», señala el profesor Hernández Borges, quien añade que «todo parece indicar que es debido a su orientación y a las corrientes que llegan a la zona».

Trabajo de Fin de Grado

Este estudio formó parte del Trabajo de Fin de Grado de Clara Álvarez Hernández, graduada en Ciencias Ambientales por la Universidad de La Laguna, defendido el pasado mes de marzo y enmarcado en el proyecto de la Fundación CajaCanarias Impacto medioambiental de los residuos plásticos en la contaminación de las playas de Tenerife (referencia 2016TUR/07). Su investigador principal es el profesor Hernández Borges, con una finalización prevista para febrero de 2020, y contempla continuar con este estudio en otras playas de la Isla.

Como parte de esta nueva línea de investigación, y con el objetivo de difundir los conocimientos adquiridos durante este periodo, así como de aportar información objetiva y veraz sobre este asunto, miembros de AChem impartirán dos cursos sobre los microplásticos. El primero de ellos tendrá lugar del 24 al 26 de julio, dentro de la Universidad de Verano de Adeje, y el segundo, en Vilaflor de Chasna, del 16 al 18 de octubre, como parte de los Cursos de Extensión Universitaria en el ámbito municipal. Ambos tienen la matrícula todavía abierta y concluirán con una salida de campo.

Se trata de un nombramiento por tres años, renovable en caso del cumplimiento total de las tareas asignadas. Entre las funciones que deberá desarrollar Hernández Borges se encuentra la revisión de un buen número de escritos, el asesoramiento a los editores sobre diferentes temas, así como fomentar la promoción y la elaboración de una estrategia de difusión.

“Es todo un honor y una enorme responsabilidad haber sido invitado a formar parte del comité editorial. Este es, sin duda alguna, un reconocimiento a la investigación que durante todos estos años hemos venido llevando a cabo en la Universidad de La Laguna en el campo de la Química Analítica. Es un orgullo que esto se reconozca internacionalmente como se ha hecho y que el nombre de nuestra institución sea cada vez más conocido”, afirma el docente del Departamento de Química y coordinador el grupo de investigación AChem (Applied Analytical Chemistry Research Group).

Dentro de su trayectoria profesional, destaca una estancia posdoctoral en el Instituto de Metodologías Químicas del CNR en Roma (2006). Con posterioridad fue contratado Juan de la Cierva en el Instituto Canario de Investigaciones Agrarias en Tenerife (2007-2008), Ramón y Cajal (2009-2013) y profesor contratado doctor (2014-2017) en la Universidad de La Laguna. Posee un índice H de 40 (Google Scholar), ha publicado más de 90 artículos en revistas internacionales indexadas y 20 capítulos de libro, al igual que ha dirigido seis tesis doctorales (todas ellas galardonadas con el Premio Extraordinario de Doctorado de la ULL) y ha sido investigador principal de varios proyectos del Plan Nacional.

En el mundo de la gestión, ha sido, además de coordinador de su Unidad Departamental, director de Secretariado de Proyección Internacional del actual Vicerrectorado de Internacionalización hasta el pasado mes de abril.