Lo normal en agosto es estar en la playa con tus seres queridos, en una terraza tomándote algo o de viaje con tu familia, pero el pasado 12 de agosto fue diferente: ese día la Unión Deportiva Las Palmas volvía a jugar un partido en Primera División. Ver camisetas amarillas por todos lados, Siete Palmas a rebosar y lo más especial, esa sensación de felicidad al ver a tu equipo en la elite del fútbol español, no lo cambio por nada.
Aquel día debutamos en LaLiga EaSports contra el Mallorca, un partido dominado en todo momento por el equipo local hizo que la afición se ilusionase a pesar de no llevarse la victoria. El conjunto grancanario comenzó a estar en todas las quinielas como candidato a descender ya que, tras cinco jornadas disputadas, solo habría conseguido dos de quince puntos posibles, pero una victoria contra el Granada en casa, con gol de Kirian en el último minuto, fue el primer punto de inflexión esta temporada.
«Luis de la Fuente no les dio la oportunidad que merecían»
Kirian Rodríguez es uno de los hombres clave de este equipo. Su capacidad de liderazgo, su ambición y sus aportaciones han sido fundamentales para la permanencia. También Álvaro Valles, el portero revelación de esta temporada, sus paradas, su juego de pies y su coraje han ayudado a la UD en todo momento. Los dos han estado a punto de ir convocados con la Selección Española, pero Luis de la Fuente no les dio la oportunidad que merecían.
Tras una buena racha de resultados, la Unión Deportiva Las Palmas llegaba al mes de noviembre a mitad de tabla, posición que cualquiera hubiese firmado en agosto. Llegaba uno de los pesos pesados de la competición al Estadio de Gran Canaria, el Atlético de Madrid, tras esto llegaría el segundo punto de inflexión de la temporada. Un Álvaro Valles salvador, un Kirian Rodríguez vestido de mago y un gol de Benito certificaron una de las victorias más placenteras del siglo en Primera División.
Después de esta victoria el Conjunto amarillo estábamos en una posición privilegiada, a diez puntos del descenso y con una dinámica muy buena. Llegó enero y visitarían Gran Canaria los dos grandes, Madrid y Barça, también tocaba viajar a Vallecas y visitar La Cerámica. Tras este mes, la Unión Deportiva Las Palmas ganaría dos de sus cuatro partidos y se colocaba octava en la clasificación liguera a dos puntos de posiciones europeas.
El tercer punto de inflexión de la temporada fue una dura derrota en el Civitas Metropolitano por cinco goles a cero. Un equipo sin identidad, sin ganas y con muchos fallos de concentración se llevó un duro correctivo de su visita al estadio del Atlético de Madrid. Tras esto llegaría la peor racha de la historia de la Unión Deportiva Las Palmas en su historia. Catorce partidos sin ganar y entre medio, ocho seguidos perdiendo pusieron al equipo en una posición muy comprometedora.
«Se escuchaban pitos desde la grada y se notaba cierto nerviosismo en los jugadores»
Llegaba al Estadio de Gran Canaria el colista de la liga: veintinueve jornadas de liga y cero victorias. Era la oportunidad perfecta para certificar la salvación de manera virtual, pero lo que parecía imposible ocurrió, la Unión Deportiva Almería ganaría su primer encuentro de la Temporada. Se escuchaban pitos desde la grada y se notaba cierto nerviosismo en los jugadores: «¿y si descendemos? ¿Por qué estamos sufriendo tras tenerlo casi hecho?», se preguntaba la grada.
Tras muchas jornadas de sufrimiento e incertidumbre llegaba el penúltimo encuentro de la Temporada. Tras un cero a cero en Cádiz, el Equipo consiguió la ansiada salvación. Lo que en enero parecía que ya estaba hecho, no se logró hasta el mes de mayo.
Después de que Miguel Ángel Ramírez dijese en rueda de prensa que habrán diez o doce bajas, pienso que este verano será largo para el Club. Una temporada llena de altibajos, de grandes actuaciones individuales y de muchas dudas ha dado para seguir en Primera División la próxima campaña.
