Bajo la dirección de Rodrigo Arribas y Laurence Boswell y con un elenco perteneciente a la compañía de teatro Fundación Siglo de Oro, Mujeres y Criados llega este 16 de abril al Teatro Guimerá. La obra se basa en un texto inédito escrito por Lope de Vega que se puso en escena por última vez en el siglo XVII. Olvidada durante casi 400 años y considerada perdida, hoy es posible revivir la obra tal y como el dramaturgo la escribió.
Localizada en Madrid, la comedia refleja la historia de dos hermanas de clase alta que intentan deshacerse de dos señores de su misma índole, un conde y un rico señor. Esto se debe a que lo que realmente quieren las protagonistas es estar con sus verdaderos amados: dos criados del citado conde. Cuando los hombres descubren que sus mozos aman a las mismas damas a las que ellos cortejan, intentan alejarlos del lugar, pero una de las enamoradas idea una artimaña con la que consigue engañar a su padre y convencerlo de que acoja al joven, creyendo que es un pariente del propio conde.
Lo llamativo del argumento es el reflejo de una verdadera transgresión social en la época en la que el autor escribió la obra. El juego de engaños, con la voz cantante de las mujeres, altera significativamente la idea tradicional. Son protagonistas quienes ocupan papeles secundarios en aquel entonces, unas por cuestiones de sexo, las mujeres, y otros por cuestiones de estamento, los criados. Lope plasma en ella la existente lucha por avanzar en contra de los prejuicios y convencionalismos que determinaban una sociedad muy establecida.
La compañía mantiene una sencilla puesta en escena que, aunque respeta lo clásico, no se estanca en ello y abre ventanas a un teatro más liberal. Una de sus protagonistas es la actriz Lucía Quintana, hija del conocido intérprete español Juan Antonio Quintana (Ana y Los 7 y Los Girasoles Ciegos). Debutó con solo 11 años en Estados Unidos y, cuando alcanzó la mayoría de edad, decidió irse a Madrid a estudiar en la Real Escuela Superior de Arte Dramático.
En cuanto a Mujeres y Criados, Quintana ha confesado que la dicción y memorización del texto de Lope de Vega tuvo una clave muy importante: «En él y en su forma encuentras todas las llaves para interpretarlo. Era como un mapa con todas las pista para interpretarlo completamente, solo tenías que descifrarlo y encontrar el sentido sin perder la forma que hace que suene como Lope quería. El verso no es prosa, es una música especial».
«Es una acontecimiento presenciar en vivo y en directo un texto de este dramaturgo, nuestro Shakespeare, que no se hace desde que se estrenó hace 400 años. Una comedia trepidante, divertida y llena de ingenio; no se la pierdan», instiga la propia actriz. Las entradas para asistir a la función de esta noche 16 de abril a las ocho y media, siguen a la venta en la web de TomaTicket. Se trata, pues, de un espectáculo indispensable para los universitarios apasionados de la literatura y el teatro.
