Los países que tienen un convenio de intercambio de estudiantes universitarios con España han pedido a sus embajadas que contacten con ellos para pedirles que regresen a sus ciudades de origen. No es una obligación, solo una recomendación. Sin embargo, la mayoría de este alumnado se encuentra en una situación de incertidumbre ante la disposición. La Universidad de La Laguna, lógicamente, no se ha queda al margen de esta medida.
Ralia Lufuma, es una joven italiana que cursa sus estudios en el Grado de Periodismo, en la Facultad de Ciencias Sociales y de la Comunicación. Subraya que la Embajada italiana se ha puesto en contacto con ella para la repatriación, pero que «ante la situación que se vive en su país, prefiere quedarse aquí y no exponerse a viajar». No obstante, añade, «si la situación aquí empeora, tendré que regresar».
«En Italia tendré que hacer catorce días de cuarentena»
En esa misma situación se encuentra Riccardo Zona, también de Italia. Él ha decidido a quedarse en Tenerife mientras la situación le permita. Según explica el joven, «la Embajada italiana trata de proporcionar vuelos para los estudiantes que quieren ser repatriados, pero todavía no están disponibles». Además, subraya que «en Italia tendré que hacer catorce días de cuarentena pues la situación allí no es buena».
El caso de Stefania Bucur, de Rumanía, es distinto. Tras recibir la llamada de su embajada, la joven tomó la decisión de regresar a casa. «Me voy mañana viernes 20 de marzo y si la situación mejora, volveré en abril», afirma.
La ULL recibió este pasado mes de febrero al segundo grupo de estudiantes erasmus (71) del curso académico, ya que en octubre llegó el primero con 285 jóvenes. De estos, 196 cursaron el primer cuatrimestre, mientras que 89 vinieron para el curso completo. De esta forma, antes del estallido de la situación de alarma en España por la propagación del coronavirus, la ULL contaba con 160 estudiantes de intercambio.