La Universidad de Cuenca, junto con las alumnas del quinto ciclo de la Carrera de Enfermería, elaboró un proyecto que se denomina Psicoprofiláxis obstétrica y estimulación temprana. Esta idea se basa en visitar los diferentes centros de salud de la ciudad y ofrecer ejercicios de relajación que mejoren el bienestar de las mujeres embarazadas. Actualmente se reúnen todos los miércoles para ayudar a doce futuras madres. Un estudiante del programa, Pedro Molina, explicó que “también se les informa a las mujeres los cambios que pueden sufrir en su cuerpo, la nutrición que deberían llevar y los signos de alerta”.
Por otro lado, en la parte psicológica, les enseñan todo lo referente al proceso de parto, mientras que en la parte física se encargan de prepararlas con ejercicios de gimnasia obstetricia. Sin embargo, estas clases no solo ayudan a las mujeres embarazadas sino que también se recomendó que asistieran los padres para mejorar las interrelaciones con el niño desde el inicio de la gestación.
Una finalidad clara
La especialista en embarazos, Janet Jiménez, explicó que “el objetivo principal de esta idea es disminuir tanto la mortalidad materna como la morbilidad”. Además, cabe destacar que beneficia tanto a la madre como al bebé para que se sientan mejor tanto física como psicológicamente.
Una madre de las que asiste a las clases, Mariana Martínez, comentó que “asiste al proyecto desde que supo que iba a ser madre y ya que la ayudan a controlar la respiración, además de darle más confianza”. Añadió que “se siente a gusto colaborando con la formación profesional de los estudiantes debido a que la preparación que se imparte le ayuda a no tener miedo”.
