La Sección de Ingeniería Agraria de la ULL acogerá hoy martes, 21 de junio, un living lab (laboratorio ciudadano) donde agentes de diversos sectores analizarán cómo va a afectar el aumento de las temperatura en los principales cultivos de Canarias. Esta actividad se desarrollará de 11.00 a 13.30 horas y pertenece a las acciones definidas en el proyecto europeo Arsinoe, que trabaja en la resiliencia de los territorios frente al cambio climático. El objetivo es que las personas convocadas compartan su visión sobre la problemática para detectar dónde se tienen que centrar las investigaciones puestas en marcha.
Algunos de los principales alimentos que se cosechan en las Islas son el plátano, la vid, el tomate y la papa. Adaptar su cuidado a las alteraciones climatológicas generadas por el calentamiento de la Tierra es esencial para seguir disfrutándolos y exportándolos, algo que se traduce en importantes ganancias económicas y en una mayor independencia en materia alimentaria.
Un informe del Grupo Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC) de la ONU afirma que Canarias es la región española más vulnerable al calentamiento global por su dependencia del exterior. «Los cultivos son muy sensibles. La idea es anticiparnos a cómo creemos que van a responder para minimizar los daños, ya sea cambiando la variedad que se planta o lo que sea necesario», apunta Noelia Cruz, profesora y coordinadora del proyecto. Otro de los aspectos que se tratará en el encuentro es la gran emisión de dióxido de carbono por parte de la industria ganadera y agrícola.
Un proyecto internacional
El proyecto Arsinoe cuenta con un presupuesto de 15 millones de euros. Son 41 las entidades e instituciones asociadas y 9 los estudios de caso en los que se trabaja a nivel internacional. Los puntos geográficos escogidos son el condado de Devon, en el sur de Inglaterra; la cuenca del río Meno, en Alemania; el sur de Dinamarca, Atenas, Cerdeña, el mar Negro, distintos puertos del Mediterráneo y las Islas Canarias.
La gestión de los recursos hídricos, la vulnerabilidad de los acuíferos y el aumento del nivel del mar son algunas de las cuestiones principales que se estudian en el Archipiélago. Para Cruz es muy necesario encontrar una solución para este último efecto del cambio climático porque «hay muchas infraestructuras, población y oferta turística en casi toda la costa». Liderar en el ahorro de agua y energía dentro de la Macaronesia es la meta, tal y como se especifica en la página web.
Horizonte 2020
Las investigaciones recogidas en Arsinoe se sitúan dentro de Horizonte 2020, un programa que combatió entre 2014 y 2020 desafíos mundiales a través de la investigación y la divulgación de nuevos conocimientos y tecnologías. Para el período comprendido entre 2021 y 2027 se ha activado Horizonte Europa, la nueva versión que contribuye en la causa.
El profesor Juan Carlos Santamarta, también coordinador del proyecto, señala que este living lab significa para la ULL poder usar nuevas metodologías. «Después de que las personas invitadas den pistas de cómo atajar ciertos problemas queremos elaborar un documento de síntesis para mejorar los objetivos y procedimientos», explica el, además, director del Aula Cultural del Agua de la Institución lagunera.
La sesión de hoy es la primera de las tres que se prevén. La segunda se celebrará dentro de seis meses y ahondará en los sistemas de innovación que podrían solventar las dificultades planteadas en la primera.