Uno de los eventos más consolidados dentro de las Jornadas de Puertas Abiertas que celebró la Universidad de La Laguna (ULL) a lo largo de la semana pasada fue su encuentro con las familias. Cientos de padres y madres acudieron el pasado jueves, 18 de enero, al campus de Guajara para participar en este acto, presidido por el rector, Francisco García, y recibir información acerca del sistema de acceso a la universidad y conocer qué supone el cambio de modelo educativo y las expectativas que sobre él se crean.
El rector recordó la longevidad de esta Institución y su carácter público, lo que define claramente su vocación de servicio a la sociedad. «Trabajamos para el sistema público. Aquí no importa la adscripción social o económica de las familias, sino el talento del alumnado y su desempeño», dijo. Además, el dirigente añadió que «es un placer ver el campus estos días poblado de estudiantes decidiendo su futuro».
Francisco García hizo referencia a las casi cincuentena de titulaciones de grado con las que cuenta el centro académico y a los procesos de verificación y control de calidad periódicos a los que se someten, lo que avala el rigor de los títulos que se expiden. También sostuvo que, a la hora de decidir el futuro del colectivo estudiantil, deben atenerse, sobre todo, a su vocación, a lo que les gusta, mucho más que a las posibles salidas profesionales. «Soy un convencido de que las personas que apuestan claramente por lo que quieren encuentran su camino», afirmó.
La vicerrectora de Estudiantes, Rosario Hernández, se dirigió a las familias más bien en calidad de docente. «Cada año es un viaje distinto, aunque se imparta la misma materia, pero cambian las personas. Ves al inicio de curso caras de alegría y otras de incertidumbre. Le dan mucha importancia al grupo, aunque no conocen a nadie. Vemos la evolución del alumnado a lo largo de los años y como hasta las personas tímidas se acercan a preguntar». También les indicó que casi al final de sus estudios llega una asignatura muy importante, la de prácticas externas, «una materia que les permite medirse y que, por lo general, les gusta mucho porque se dan cuenta de la buena preparación que tienen».
Acompañamiento
Tanto la vicerrectora como la asesora jurídica del Servicio de Información y Orientación, Rocío Medina, pidieron a las familias que acompañaran a cada estudiante tanto en el tránsito a la educación superior como durante su estancia en la Universidad. «La toma de decisiones compartida es crucial. Posiblemente esta sea la primera gran decisión que tomarán, por eso les pedimos que los acompañen. Es muy importante este apoyo y es algo que ellos siempre nombran en el acto de imposición de la orla, donde agradecen a las familias, a docentes y a la Universidad, lo que tiene un inmenso valor siendo una institución pública».
Rocío Medina, por su parte, aseguró que la Universidad de La Laguna es una institución moderna, del siglo XXI, homologable con cualquier universidad europea. Recordó que esta es la vigesimosexta edición de estas jornadas: «No hay nada más motivante que recibir a futuros estudiantes, por eso necesitamos crear alianzas con ustedes, los padres y madres».
Medina explicó en primer lugar la conformación de los estudios universitarios, divididos en grado, máster y doctorado. También ahondó en los requisitos de acceso, no solo los administrativos sino otros intangibles, pero de gran calado: interés por el grado, contar con los conocimientos necesarios y suficientes para iniciar los estudios, evitar el absentismo académico e implicación personal y responsabilidad.
«La vocación no se espera, se construye», dijo Medina en referencia a que muchas veces el alumnado se entusiasma con sus grados a medida que avanzan en ellos. «Necesitamos titulados universitarios con inteligencia emocional, pensamiento crítico, flexibilidad cognitiva, con capacidad para la resolución de problemas complejos y, sobre todo, con creatividad», un elemento este último muy destacado por la orientadora. «Todos ellos se consiguen en la universidad pública», aseveró.
Medina también explicó el procedimiento de acceso y la concurrencia competitiva en la que se basa. Los límites de plazas, el reparto por cupos, la adjudicación de plazas y listas de espera fueron otros conceptos manejados por la experta. Hubo tiempo, igualmente, para adentrarse en las becas y ayudas al estudio que proporciona la Institución, el coste de la matrícula y algunos servicios estrechamente vinculados a los estudiantes, como son las ayudas de comedor, para dificultades económicas, gastos de guardería, necesidades de apoyo educativo, bolsas de viaje, asociacionismo y fomento de la participación estudiantil.
La asesora citó servicios disponibles: bibliotecas, salas de estudio, tarjeta universitaria virtual, aulas y escritores virtuales, cafeterías y comedores, deportes, idiomas y programas de movilidad, así como el programa de atención a estudiantes con discapacidad, a través del cual se facilitan los recursos que sean necesarios. La sesión cerró con un turno de preguntas de progenitores sobre diversos aspectos de la vida académica.