Las XV Jornadas de Psicología y Logopedia continuaron ayer martes, 2 de marzo, con cuatro talleres prácticos que se impartieron de forma simultánea. Entre ellos, se encontraba el seminario Psicología aplicada al deporte. Este acto fue impartido por Juanra Álvarez, psicólogo en el Club Deportivo Tenerife y especialista en Psicología de la Actividad Física y del Deporte. Contó también con Francisco Batista, psicólogo deportivo, y Jorge Pastor, psicólogo educativo. Esta actividad tuvo lugar en el aula 04 del Aulario del Campus Guajara.
Como novedad, este año las personas interesadas también pudieron asistir a la ponencia vía online a través de Google Meet. El acto se dividió en cuatro grandes partes. Álvarez explicó la importancia de la psicología dentro del campo de los deportes a nivel competitivo y compartió sus experiencias dentro del Club, todas ellas con jugadores y entrenadores hombres. Todo esto fue acompañado de dos prácticas y pequeñas intervenciones del público que asistió al acto.
Psicología para entrenadores y jugadores
La forma de comunicar y de transmitir información es muy importante, es por esto por lo que Juanra decidió dedicar unos minutos a hablar sobre el trabajo que hace con los entrenadores. Entre estas actividades, se encuentran los análisis DAFO individuales, grabar la comunicación pre y pospartido, así como análisis de la comunicación no verbal para mejorar las relaciones con el equipo.
La pretemporada es un momento importante a nivel psicológico. «Es un periodo en el que el jugador toma consciencia, se reestructura cognitivamente y se pone en acción», afirmó Álvarez. Es por esto por lo que el psicólogo aprovecha la pretemporada para proponer situaciones y preguntas hipotéticas a las que los jugadores deben responder. De acuerdo con Álvarez, «el jugador muchas veces no avanza por creencias, por malos hábitos, no tiene apertura al cambio y muchas otras situaciones circunstanciales».
Respiración y visualización
Para hacer un pequeño descanso entre cada una de las secciones del seminario, Álvarez propuso dos dinámicas. La primera, respiración. Esta práctica consistió en adoptar una buena postura y focalizar toda la atención en la respiración. Según manifestaron algunas personas asistentes, esta práctica les sirvió para relajarse y evadirse durante dos minutos de sus preocupaciones.
La segunda actividad se centró en la visualización. Así, esta dinámica fue bastante similar a la anterior, pero con una pequeña variante: pidió que cada persona eligiera un deporte y que se imaginaran realizándolo. El público, con tan solo cerrar los ojos y respirar, se transportó a escenarios en los que tuvieron imágenes claras del deporte escogido.
«Revelador», «enriquecedor», «informativo», «innovador» o «motivador» fueron las palabras que más se repitieron cuando Álvarez, Batista y Pastor preguntaron a los asistentes por las sensaciones que les había transmitido el taller.