En 2006 surge la Asociación de Estudiantes de Medicina de Tenerife (AEMTE) de la mano de los alumnos de Ciencias de La Salud de la Universidad de La Laguna. Su objetivo principal fue el de “organizar actividades para que estudiar Medicina saliera de las aulas”. Así lo explica la vicepresidenta de la asociación tinerfeña, Almudena Núñez. Esta agrupación se unió a la Federación Española de Estudiantes de Medicina, IFMSA-Spain, que pertenece, a su vez, a una organización internacional del mismo nombre, fundada en 1951 en Copenhague. En la actualidad, en España son 25 facultades públicas de esta carrera las que forman parte de ella.
Durante todo el año, realizan diversas actividades de sensibilización, de impacto local, así como charlas o debates relacionados con el ámbito de la rama y campañas de prevención de la salud. Además, los estudiantes de la Facultad pueden realizar intercambios con alumnos de otros países. Lo más relevante es el Día Mundial de la Salud, en abril, nos cuenta Elizabeth McGarr, presidenta de AEMTE: “Lo bonito es que en estos ciclos recopilamos las tareas que llevamos a cabo durante todo el año, y recogemos la información que han aprendido los compañeros. En esta jornada, tenemos stands dedicados a diferentes enfermedades, entre ellas la diabetes. Es el evento en el que conseguimos que acuda mayor número de personas”.
Sin embargo, “el acto que más suele llamar la atención es el Hospital de Ositos (Teddy Bear Hospital), porque hace más ilusión a los alumnos de primer año. Se trata de su primera interacción con pacientes, aunque no lo sean de verdad y pueden tener el primer contacto como médicos”, explica la presidenta de la delegación tinerfeña. El Teddy Bear Hospital es un proyecto oficial nacional, desarrollado por un comité perteneciente a IFMSA- Spain, que organiza la jornada con el fin de que esta pueda ser realizada por las diversas facultades suscritas, dirigida a un público infantil.
La idea es que los más pequeños pierdan el miedo a los hospitales y a los médicos. Además, los estudiantes adquieren sus primeras experiencias como doctores en el trato que se le debe dar al paciente.
«La juventud puede tener un impacto social y un rol activo en la sociedad»
«En los últimos dos años, se ha percibido un mayor interés y participación por parte del alumnado, tanto de la propia Facultad como de la comunidad universitaria», afirma Núñez. La vicepresidenta explica que “lo primero es que Medicina no se resume a las aulas y a los profesores. Sí es verdad que tenemos mucho que estudiar y son muchos años de formación continuada, pero también es verdad que la juventud, en muchísimos aspectos, puede tener un impacto social y un rol activo en la comunidad. La Asociación nos ayuda a desarrollar valores, porque somos futuros médicos y vamos a estar de cara a realidades muy diversas».
Además, McGarr cuenta que pertenecer a la asociación le recuerda, en el día a día, y cuando las cosas se ponen difíciles, por qué eligió esta carrera. «Al final lo que siempre buscamos e intentamos que se cumpla, como asociación, no solo es involucrar a los alumnos sino llegar a la mayor cantidad de gente que se pueda. Implicarse en algo más que el estudio también es gratificante y, de hecho, estas agrupaciones estudiantiles lo que hacen es que consigamos ir mucho más allá de los libros”, asevera Núñez.