El documental Stolen Fish nació en 2019 con la intención de acercar al público europeo las realidades poco conocidas que se viven en países como Gambia. Su directora, Gosia Juszczak, asistió este 21 de abril a la proyección de la obra en el Aula Magna del Aulario de Guajara con motivo del Seminario de Migraciones: entre la expresión artística y la investigación social. Con la coproducción de la Fundación de Rosa Luxemburg, Minority Rights Group International y Compassion in World Farming International, el cortometraje mostró la dura realidad que se viven en ciertas regiones de África.
La cineasta denunció la explotación de la industria pesquera por parte de las empresas chinas, que han asentado sus buques en zonas restringidas y de forma ilegal, amenazando la principal fuente de sustento de la sociedad gambiana. Además, explicó la importancia de la concienciación sobre la responsabilidad social en temas como los que trata Stolen Fish y su deseo por cumplir un proyecto actual con la película, en el que intenta «llegar a las escuelas e institutos, gracias al formato del corto, perfecto para ser recibido por los jóvenes».
El cortometraje cuenta con veinte premios y cuatro menciones especiales, entre los cuales desacatan el Premio al Mejor Corto en el Livable Planet Film Festival en San Francisco y el Premio al Mejor Documental en Kraków Green Film Festival de Polonia y la mención especial en el Festival de Cine de Polonia Afrykamera.