La tercera jornada de la fase de grupos del Trofeo Rectora en la modalidad de fútbol sala masculino se disputó en el mediodía de ayer, 5 de noviembre, en el Pabellón Central de la Universidad de La Laguna. Justo a las 13.00 horas sonó el pitido inicial en el partido entre Viejas Glorias, vestidos de negro, y River Plato, de azul. El encuentro estuvo igualado casi todo el tiempo, pero se puede decir que mereció un poco más el de casa si nos referimos únicamente a las ocasiones y a la calidad ofrecida. Finalmente, el juego terminó con una igualada 2 a 2.
Durante la primera parte, las situaciones de peligro se sucedieron en las dos áreas, mostrando ambos conjuntos un gran despliegue físico, pero poco más tarde se adelantó el combinado azul en el minuto diez. Aunque los locales intentaron por todos los medios igualar el resultado, se fueron al descanso con ventaja para los de fuera.
Viejas Glorias encontró el ansiado empate
Al inicio de la segunda mitad, el equipo negro salió decidido a equiparar el marcador desplegando un gran nivel con la pelota en los pies y gozando de numerosas oportunidades para encontrar el equilibrio en el casillero. Sin embargo, River Plato conseguiría aumentar su renta con otro tanto a mediados del choque. Eso no hizo que los locales se rindieran, ya que dos minutos después anotaron el 1 a 2.
En ese momento Viejas Glorias se lanzó a equilibrar el resultado y, en una gran combinación colectiva, marcaron el definitivo 2 a 2 totalmente merecido por los esfuerzos realizados. Ya en la última jugada de la contienda hubo una discusión fruto de la intensidad que tuvo la competición. Como consecuencia, el partido finalizó con igualdad en el electrónico, la cual dejó más contentos a unos que a otros, ya que el primer conjunto conseguía la clasificación. No obstante, para los espectadores fue un disfrute debido a los grandes goles de ambas escuadras.
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