El Foro Universitario Talent&Job organizó ayer martes, 12 de mayo, la videoconferencia Factores clave para iniciarse en el teletrabajo para estudiantes universitarios. Diferentes ponentes disertaron con el objetivo de presentar al alumnado una modalidad de empleo cada vez más conocida. La charla estuvo dirigida por Elsa Rodríguez, lead manager de Tenerife Work and Play, que coordinó el debate entre los profesionales asistentes: Carlos Ble ( Fundador de Lean Mind), Carlos Suárez (cofundador de la escuela de trabajo remoto), Fer Martín (fundador y director de Reboot Academy) e Isidro Quintana (fundador y CEO de Triple-0-Games).
La primera cuestión que se abordó fueron las carreras profesionales que podían tener la posibilidad de ejercer el teletrabajo. Carlos Suaréz afirmó que existen un sinfín de profesiones que se pueden llevar a cabo desde cualquier lugar y que no requieren de espacio físico. Fer Martín añadió que «aunque esto es cierto, es importante tener en cuenta que el teletrabajo te da una gran libertad, que de cierta forma debe ser equilibrada con bastante responsabilidad».
Uno de los factores claves que se comentó durante la charla fue el desarrollo de las habilidades blandas o soft skills. La empatía, comunicación, capacidad de delegación, motivación y la escucha activa son algunas de ellas, que como afirmó Suárez, «suponen un plus que nos diferencia del resto en el mercado laboral». Carlos Ble, con posterioridad, hizó hincapié en fomentar una educación más ágil, que sea capaz de adaptarse a las nuevas formas de empleabilidad.
Isidro Quintana ofreció una serie de herramientas básicas para el teletrabajo. Compartiendo su pantalla, mostró a los asistentes las que él usaba: el Slack, una herramienta de comunicación online, similar a Whatsapp, con la diferencia de que se simulan diferentes salas, como si fuese una oficina virtual; el Zoom, bastante útil para realizar videollamadas, y Trello, un software que facilita la administración de proyectos. Por último, recomendó el conjunto de herramientas de Google Drive, que hacen más sencillo gestionar los documentos.
Tras las intervenciones comenzó la sesión de preguntas. Elsa Rodríguez, se mostró sorprendida ante la gran cantidad de participación que tuvo la audiencia, llegaron bastantes preguntas, por lo que no se pudieron contestar a todas. Los asistentes se preguntaban que métodos se pueden llevar a cabo para organizarse sin distracciones en esta forma de trabajar. Las principales recomendaciones dadas por los conferenciantes fueron: evitar lugares de distracción, tomar pequeños descansos sin mirar la pantalla, aprender a estructurar el día organizándote en horas y tareas y, sobre todo, darte cuenta de que es lo que te hace perder más tiempo para evitarlo.
Ahorro de costes
Otra de las cuestiones que surgió fue si esta forma de trabajar suponía un beneficio económico a las empresas. La respuesta a esta pregunta fue que efectivamente lo hacía. Isidro Quintana puso el ejemplo de Zoom, afirmando que la compañía se ahorró un 25 % de los costes debido al trabajo telemático que ha supuesto esta pandemia, La reducción de tiempo y contaminación, por no ser necesario el uso de transporte, fueron beneficios adicionales señalados por Carlos Suárez . Ble, por su parte, afirmó que lo más satisfactorio es que esta modalidad de ejercer una labor, permite a quienes la hacen organizarse por sí mismos y tener más tiempo para ellos, lo cual aporta una felicidad extra.
Fer Martín recomendó al alumnado presente comenzar desde hoy mismo a construir su marca personal, esa que los va a diferenciar del resto, y que les va a dar un valor en el mercado laboral. Es cuestión de aprender y de no tener miedo a hacerlo, afirmó. Isidro Quintana hizo referencia a la importancia de concienciar a las empresas sobre la necesidad de comenzar a medir el trabajo en base a la productividad del empleado y no a las horas dedicadas.
Para finalizar, se comentó que los mayores inconvenientes del teletrabajo eran la sensación de aislamiento frente a otras formas de trabajo, las distracciones que abundan por lo general en la casa, los recursos técnicos propios y, sobre todo, la dificultad de hacer ver al resto de personas, que aunque estés en casa, estás trabajando y requieres de un ambiente confortable para ello.