La catedrática María Arcas Campoy forma parte del proyecto de investigación Documentos de la Granada nazarí y mudéjar. Estudio de las colecciones (Derecho, Economía y Sociedad), en el que trabaja con un grupo formado principalmente por arabistas, basado en el objetivo de intentar dar a conocer la realidad de la Granada nazarí. “Nosotros siempre trabajamos en documentos inéditos, muchas veces nadie los ha visto”, asegura. Este trabajo se empezó en enero de 2003 y se prolongará hasta diciembre de este año.
Pero este no es el único proyecto en el que participa. También, está vinculada a La propiedad aristocrática en la Granada Nazarí y su traspaso a la sociedad castellana, dirigido por Carmen Trillo, profesora de la Universidad de Granada. Arcas Campoy, lo define como “un trabajo coordinado de Las Almunias del Occidente islámico”. La palabra “almunia” tiene su origen en la lengua árabe y significa huerto, granja o finca. De ahí que el proyecto se base en las características de las fincas de la aristocracia nazarí y la evolución de las mismas cuando pasaron al poder castellano.
La profesora asegura que su participación en dicho trabajo se centra en la utilización de fuentes de documentos antiguos escritos en la lengua árabe, con el fin de ofrecer datos necesarios para que el proyecto continúe. Además de arabistas, también participan, entre otros, arqueólogos e historiadores medievales.
Además de investigadora, también imparte docente de Estudios Árabes e Isalámicos en la ULL, donde lleva 40 cursos académicos y forma parte del grupo ESARIS. Para ella, “una lengua no se puede estudiar sin su contexto”. Esta es la razón por la que a los alumnos siempre se les ha hecho referencia a temas que les ayuden a conocer la civilización árabe y sus características.
Destaca que su aportación en la investigación relacionada con el mundo árabe es muy pequeña. Sin embargo, con más de 70 publicaciones y 40 congresos en distintos sitios a los que ha asistido, “es algo que te envuelve”. Recuerda a una compañera suya que comparó la investigación con un cesto de cerezas, puesto que al intentar sacar una, salen enganchadas muchas más. Y más o menos de esa forma lo define Arcas Campoy: “La investigación es como una novela policiaca, tiras de un hilo y te salen dos o tres más”. Estima que dentro unos años se jubilará, aunque es bastante clara a la hora de expresar sus intenciones: «Las clases se me acaban, pero la investigación, no”.