Final Fantasy XVI es el último juego de la exitosa saga desarrollada por Square Enix. Su lanzamiento está previsto para el próximo 22 de junio, únicamente en PS5 por 79,99 euros. La nueva entrega nipona agrega un tono mucho más adulto que sus predecesoras. La guerra entre las principales potencias que gobiernan la tierra media y el resurgir de una misteriosa plaga son los escenarios en los que transcurre la historia del protagonista.
En el mundo de Valisthea existen los ansiados cristales progenitores, dominados por el cristal madre. Estos objetos de gran poder proveen a los reinos del éter, una sustancia que asegura su estatus y paz. Sin embargo, la aparición de una extraña enfermedad afila aún más la creciente tensión entre los reinos: El Gran Ducado de Rosaria, el Sacro Imperio de Sanbreque, el Reino de Waloed, la República Dhalmekiana y el Reino de Hierro.
Contará con más de once horas de cinemáticas
A todo este entramado político se le añaden los dominantes, humanos capaces de controlar y ostentar el poder de los eikon, seres de gran poder mágico. El principal personaje es Clive Rosfield, hijo del rey de Rosaria y hermano mayor de Joshua, el actual dominante del Fénix. Joshua le otorgó la bendición del fénix, y gracias a ello, Clive puede empuñar parte del fuego de su eikon. Todo explota con una gran tragedia en el seno de la familia Rosaria.
El combate es de tipo hack and slash, similar a otros títulos como Devil May Cry o God Of War. Tres botones son la estructura de este sistema, uno sirve para las arremetidas con la espada, otro para las ofensivas mágicas a distancia y el último proporciona la esquiva. Los asaltos físicos y mágicos se pueden combinar para realizar poderosos combos.
El último añadido básico es el ataque límite. Proporciona una temporal transformación en la que la fuerza y velocidad aumentan su poder. Los jefes poseen una barra de aturdimiento que disminuye con las acometidas encadenadas, cuando llega a cero el enemigo quedará aturdido por unos momentos y vulnerable, un momento en el que los golpes del usuario causan más daño.
