El objetivo de su puesta en marcha es formar profesionales del compostaje con conocimientos tanto teóricos como prácticos en la gestión de biorresiduos. De este modo, se garantiza la correcta implementación, funcionamiento y resultados de las zonas de compostaje comunitario existentes en Tenerife. Para ello, se combinarán sesiones de conferencias y clases magistrales, con ejercicios prácticos, salidas de campo y realización de prácticas sobre el terreno. Para poder participar es necesario inscribirse a través de la sede electrónica de la ULL.

Este curso de Formación en Desarrollo Sostenible 2022 estará dirigido no solo a miembros de la comunidad universitaria, sino también a personas interesadas en este ámbito, técnicos de administraciones públicas y equipos de gobierno con responsabilidades de gestión de residuos. Carlos Jiménez Martínez, profesor de Bellas Artes de la ULL e investigador en diseño para la innovación social y la sostenibilidad, se encargará de dirigir todo el proceso. El docente e investigador, es además promotor de iniciativas de diseño para la gestión descentralizada de biorresiduos, comunicación ambiental y procesos participativos.

Jonathan Luis cuenta que la idea nació tras varios días de entrenamientos duros, ya que se estaba preparando para correr su primer medio maratón: «corría por un lugar lleno de basura y me cabreaba verla tirada por todos lados. Entonces pensé en aprovechar el esfuerzo y la energía que generamos todos mientras hacemos ejercicio. De este modo se le da valor e invertimos en el medioambiente». Deporte y naturaleza se unen dentro de esta organización que busca transmitir un mensaje tan importante como necesario, al mayor número de personas posibles.

Desde la asociación tratan de «reducir todo tipo de residuos, librar a la naturaleza de basura y generar energía para conseguir muchos kilómetros verdes». El ingeniero afirma que pretenden crear una gran comunidad comprometida que deje un mundo mejor a las nuevas generaciones que están por venir, asegurándoles un futuro a nuestros hijos. «Cada uno de nosotros debemos ser partícipes de las diferentes actividades que se realizan, viendo el problema in situ y tomando conciencia de las consecuencias que originan el depositar los residuos fuera de su lugar», asegura

Aunque a simple vista pueda parecer que medioambiente y deporte no mantienen relación, esta organización ha sabido fusionarlas, apostando por la mejora de la naturaleza mientras se ejercita el cuerpo: «Es necesaria la implicación de personas comprometidas, que aportan su energía al realizar ejercicio y disfrutan de los entornos naturales. Nosotros damos valor a ese esfuerzo y lo transformamos en acciones ambientales, obteniendo espacios limpios y verdes como resultado de dicha implicación. Con esfuerzo y energía se puede ayudar al Planeta y es una contribución de la que sentirse orgulloso».

La asociación ya cuenta con más de 26 000 personas afiliadas y 13 100 kilómetros recorridos, además de diversos patrocinadores como Cercan o Blue One Banderas. Sin embargo, Jonathan Luis sostiene que «cuesta mucho llegar al corazón de la ciudadanía, la gran mayoría piensa que la lucha es cuestión de unos pocos que sacrifican tiempo de estar con sus amistades y familia por ayudar a ratos a cuidar de la Tierra». La última actividad realizada por esta organización se llevó a cabo este pasado sábado 20 de noviembre. Una jornada que consistió en la limpieza de residuos a lo largo del recorrido de la Berserker Xtreme Race, una competición deportiva que pone en marcha el Ayuntamiento de Arico.

Este proyecto cuenta, entre otros, con la colaboración de la Fundación Cepsa, que promueve la conservación de la biodiversidad, la rehabilitación del patrimonio natural y la educación medioambiental. Además, está apoyado por la Fundación Santa Cruz Sostenible, cuyo objetivo es fomentar la sostenibilidad como eje principal del municipio y los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS). Por su parte, la asociación Terramare Medioambiente, también sustenta el acto junto a la Red de Vigilantes Marinos, un grupo de voluntariado que coordina limpiezas de fondos que se realizan en numerosos puntos del litoral español.

Para poder participar en la limpieza del litoral de la playa de las Teresitas se debe rellenar la inscripción, que se habilita desde las diferentes entidades organizadoras. Se realizará una recogida tanto de residuos terrestres, como de forma submarina, invitando también a colaborar a la comunidad submarinista. Este tipo de actividades se han realizado durante los años con el objetivo de fomentar la concienciación entre la ciudadanía, además de proteger los ecosistemas.

La agricultura ecológica es un método de producción cuyo objetivo es obtener alimentos utilizando sustancias y procesos naturales. De este modo, se busca promover el uso responsable de las energías y los recursos de la naturaleza, el mantenimiento de la biodiversidad, la conservación de los ecosistemas o la calidad del agua, entre otros factores. Esta práctica ha ido adquiriendo valor en los últimos años, gracias a la concienciación de la ciudadanía sobre la importancia de consumir productos sostenibles. La ULL busca, mediante la impartición de este curso, que el alumnado adquiera conocimientos sobre el acondicionamiento de las parcelas, la preparación del terreno, las variedades de trigo, cultivo de papas y leguminosas, la fertilidad del suelo, etc.

El curso está organizado por el Vicerrectorado de Cultura y Participación Social conjuntamente con la Asociación de Antiguos Alumnos y Amigos de la Universidad de La Laguna (Alumni ULL) y el Seminario Permanente de Agricultura Ecológica-ULL, con la colaboración de la Escuela Politécnica de Ingeniería Agrícola y del Medio Rural y la Sección de Ingeniería Agraria. Las inscripciones se pueden realizar a través de la agenda de eventos de la ULL, hasta el día 16 de noviembre, y la realización del mismo será reconocible por 3 ECTS.

Ingenia es un programa de la ULL que tiene como objetivo preparar a la comunidad universitaria para enfrentarles a los retos complejos que puede presentar la actualidad, poniendo en práctica los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS) en Tenerife. Para ello, impulsan la innovación y el emprendimiento acompañando, formando y financiando proyectos ligados a los ODS y la ACDS. De este modo, pretenden incentivar la adquisición de conocimientos vinculados a la sostenibilidad, las comunidades y el emprendimiento, al mismo tiempo que se produce un aprendizaje con experiencias reales.

El festival Ingenia impulsó durante su primera y segunda edición un total de 24 proyectos sociales y medioambientales de carácter universitario. Además, contó con la colaboración de la comunidad investigadora, profesorado, estudiantado y diferentes organizaciones públicas y privadas. Esta tercera edición estará dirigida por el director de secretariado del Vicerrectorado de Estudiantes y Empleabilidad de la ULL, Carlos Efrén Mora, y la profesora del Departamento de Didáctica e Investigación Educativa de la ULL, Belén San Nicolás. Las inscripciones para participar están abiertas hasta este jueves 4 de noviembre en la agenda de eventos de la ULL.

El acto del día 27 consistirá en un foro online de dos horas, que tiene como objetivo fomentar la importancia de la protección medioambiental entre la comunidad universitaria. Por otro lado, el día 28 se realizará un taller práctico de dos horas y media en el Malpaís de Güímar, en el que se llevará a cabo la recogida de residuos vertidos en el medio. De esta forma se busca incentivar los hábitos y actitudes correctos para la preservación de un espacio natural protegido. Las inscripciones se pueden realizar desde la agenda de eventos de la ULL.

Esta actividad de extensión universitaria está organizada por el Vicerrectorado de Infraestructuras y Sostenibilidad, la oficina de la Participación y el Voluntariado Ambientales del área de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Seguridad del Cabildo de Tenerife, el Club Deportivo Aguavenque y la Fundación Canaria Telesforo Bravo Juan Coello. Además contará con la colaboración del Área de Gestión del Medio Natural y Seguridad del Cabildo de Tenerife y el Ayuntamiento de Güímar.

Este foro reunirá a los principales expertos en agroecología en una oportunidad para debatir sobre las estrategias, técnicas y nuevos recursos que se pueden incorporar en el manejo de los cultivos. Además, contará con el apoyo de las instituciones, como el propio Gobierno de Canarias, el Instituto Canario de Investigaciones Agrarias (ICIA), el Cabildo de Tenerife, la Fundación Instituto de Agroecología y Sostenibilidad (Fiaes), la Cátedra Cultural de Agroecología Antonio Bello y la Asociación de Organizaciones de Productores de Plátanos de Canarias (Asprocan).

Miguel Ángel Altieri, profesor retirado de Agroecología en la Universidad de California y participante en el encuentro que se desarrollará en Tenerife, cree que «el cambio climático y la pandemia de la Covid-19 han creado condiciones para que la agroecología adquiera una nueva relevancia, sugiriendo caminos para reconstruir una agricultura más diversificada y resiliente que sea capaz de enfrentar las crisis del futuro».

¿Es la agroecología la respuesta para lograr un sistema alimentario saludable y sostenible que sea, también, capaz de alimentar a una población mundial cada vez mayor? Producir más con menos es el gran reto de la agricultura, y en este sentido, «la sanidad vegetal en cultivos mediterráneos y subtropicales. Retos ante una transición agroecológica» pretende abrir un gran diálogo sobre las dificultades y oportunidades de esta transición desde la perspectiva fitosanitaria.

El plan ha sido adjudicado a la Red Eléctrica de España (REE), convirtiéndose en la mayor obra de ingeniería civil española. En 2016 se llevó a cabo la instalación de una planta ubicada en Santa Águeda, Mogán, con una calidad de producción de hasta 7 800 metros cúbicos al día, suponiendo un avance en la realización de este proyecto. Actualmente se prevé que las acciones se establecerán principalmente, en tres municipios de la Isla: San Bartolomé de Tirajana, Mogán y Tejeda. Pero ¿cuál es el problema que gira entorno a la instalación de esta central?

Mientras hay quienes alaban que gracias a ella se producirá el cambio definitivo que convertirá a Gran Canaria en un motor de energías renovables, otras personas consideran que solo provocará devastación y destrucción del territorio. Con todo esto, ¿cuál es la verdadera realidad?

¿Qué es una central hidroeléctrica reversible?

Antes de comenzar a tratar las ventajas  y desventajas que puede ocasionar este proyecto a Gran Canaria, se debe conocer primero qué son este tipo de centrales y cómo funcionan. Una central hidroeléctrica reversible es una instalación de almacenamiento de energías que cuenta con dos embalses de agua a diferentes alturas, uno superior y otro inferior. Estas funcionan gracias a dos modos: por bombeo y por turbinación.

El modo bombeo consiste en transportar el agua desde el embalse inferior al superior. En este proceso se absorbe energía eléctrica de la red que queda almacenada en forma de energía potencial en el embalse superior. En los periodos donde el consumo de electricidad es apenas notable, normalmente en las horas de madrugada, se aprovecha la fuerza eléctrica para bombear el agua al embalse superior y la energía potencial almacenada puede ser utilizada en el proceso de turbinación.

En el modo turbinación el orden se invierte. El agua se transporta desde el embalse superior, al embalse inferior, devolviendo a la red la energía almacenada durante el bombeo. El agua almacenada circula por una tubería forzada hasta el embalse inferior, accionando las turbinas de la central e integrando en el sistema la energía renovable previamente acumulada.

Beneficios

La doctora Julieta Schallenberg, ingeniera industrial y profesora titular de la ULPGC, establece que Gran Canaria tiene una dependencia del 84 % a las combustiones petrolíferas. Sin embargo, el total de energías renovables en la Isla apenas representa un 16%. Este porcentaje corresponde a la energía eólica, mayoritariamente, y a la energía solar fotovoltaica, que se encuentra distribuida en menor medida. Por este motivo, la doctora considera necesario la instalación de centrales de hidro-bombeo que permitan el almacenamiento, disminuyendo los costes y el impacto medioambiental.

Gonzalo Piernavieja, coordinador de I+D+i del Instituto Tecnológico de Canarias (ITC) afirma que la planificación de la central hidroeléctrica del Hierro supuso un proyecto puntal  y aumentó la penetración de las energías renovables, convirtiéndose en la Isla con mayor penetración. De este modo, confirma que el proyecto Chira-Soria prevé seguir la misma línea, conformando un referente para toda Canarias. «Esta central es las única manera de transformar Gran Canaria para que esté más cerca de ser 100 % renovable», sostiene.

Según la REE, promotores del proyecto, la central hidroeléctrica de bombeo constituye una infraestructura esencial para avanzar hacia la sostenibilidad del nuevo modelo energético canario, basado en las energías renovables y el respeto al medioambiente. La realización de este plan supondría una mayor garantía de suministro para la Isla, al aumentar la potencia instalada y refuerzo de la seguridad del sistema energético. Además, en caso de interrupción del suministro permitirá agilizar y reducir drásticamente los tiempos de reposición.

Por otro lado, incrementará la integración de energías renovables puesto que dispone de una instalación que aprovecha los excedentes de esta e integra una mayor cantidad de energía autóctona. De llevarse a cabo, se prevé que en 2026 la producción renovable aumente hasta el 37 %. Esto provocará una reducción adicional de las emisiones anuales de CO2 de un 20%. Del mismo modo, gracias a este proyecto, Gran Canaria contaría con una mayor independencia energética y un ahorro en los costes que supondría 122 millones de euros anuales, que se reducen de las importaciones de combustibles fósiles, más caros y más contaminantes.

Yonay Concepción, director técnico de la central hidroeléctrica Chira-Soria e ingeniero de caminos, canales y puertos, afirma que gracias a esta planificación en 2026 la penetración renovable será del 51 %, superando el 42% establecido en el Plan Nacional integrado de Energía y Clima. Añade que «la población canaria sufre un desabastecimiento de agua en los embalses, debido a la falta de lluvias, que gracias a estas acciones se prevé solucionar».

Desventajas

Por otro lado, la plataforma Salvar Chira-Soria, barranco de Arguineguín, conformada por varias asociaciones como Ben Magec-Ecologistas en Acción, Parents for Future Canarias o Los Verdes, entre otras, manifiesta que esta obra debe ser descartada, pues consideran que tendrá consecuencias irreversibles para el medio ambiente.

José Luis Porta, activista de la plataforma ciudadana Salvar Chira-Soria y especializado en tecnologías de almacenamiento de energía, establece que la elaboración de este proyecto es una equivocación innecesaria y que existen alternativas a él que no supondrían la destrucción paisajística del entorno. «El verdadero problema está en los grupos térmicos que obstaculizan las renovables y que deben ser reemplazados», subraya.

El especialista en tecnologías de almacenamiento de energías recalca que cada año Gran Canaria tira al mar un océano de masas de agua en diferentes condiciones de depuración, contaminando nuestro propio litoral. Si esta, en lugar de verterse al mar se reutilizase, la Isla tendría un suministro capaz de abastecerse por sí mismo, contradiciendo las afirmaciones sobre la falta de agua dadas por Yonay Concepción. Menciona, además que «no existe una evidencia científica, ni estudios, ni simulaciones que justifiquen la necesidad de llevar a cabo esta instalación, más allá de la propaganda y las acciones publicitarias».

La plataforma ha alegado en varias ocasiones que este proyecto supondría un atentado paisajístico en uno de los últimos espacios vírgenes que alberga el suroeste gran canario, afectando a cinco espacios naturales de la Red Natura 2000: la Zona Especial de Conservación (ZEC) Nublo II, Macizo de Tauro II, Franja Marina de Mogán y Tauro y Zona Especial de Protección de Aves (ZEPA) de Ayagaures y Pilancones

Pedro Pablo Medina, profesor asociado de la ULPGC y activista medioambiental de la plataforma salvar Chira Soria, asevera que existe un techo ecológico y sobrepasarlo supondría la destrucción del territorio. Añade que los intereses políticos y empresariales no pueden estar por encima de la sostenibilidad y el coste medioambiental. Y que además, este proyecto manipula legalmente todos los procesos para impulsarlos, como el pago realizado a ENDESA para que no interfiriese en la realización. Culpa a la empresa del oscurantismo y de la industrialización del barranco de Arguineguín, además de querer devastar 200 kilómetros cuadrados de la Isla.

Finalmente, a la espera de que el Gobierno de Canarias publique el informe sobre el impacto medioambiental, para hacer posible que el Ministerio de Industria obtenga la autorización definitiva y continuar con la planificación, Salvar Chira-Soria ha convocado una nueva manifestación el próximo 16 de octubre, en busca de la reivindicación por la conservación del paisaje.

La obra estaría unida a la costa por un puente de 122 metros de longitud con cuatro carriles de circulación y aceras laterales para el tránsito peatonal. El plan afectará a los núcleos costeros de Alcalá, la playa de San Juan y la carretera TF-47, en el suroeste de Tenerife. Sin embargo, se han detectado varias irregularidades. La más grave es el hecho de que se diseñase el proyecto sin que hubiese un plan territorial previo, por lo que no se ha cumplido el procedimiento legal establecido.

Desde la plataforma Salvar Fonsalía y Ecologistas en Acción hacen un llamamiento a la ciudadanía recogiendo firmas para detener el proyecto. Alegan que la realización del puerto es un «atentado medioambiental» puesto que se encuentra ubicado en medio de la Zona de Especial Conservación (ZEC) Franja Marina Teno-Rasca, un área que pertenece a la Red Natura 2000. Este entorno protegido cuenta con 69 489 hectáreas que pretende asegurar la supervivencia de las especies y los hábitats naturales, contribuyendo a detener la pérdida de la biodiversidad. La puesta en marcha de un proyecto de tales magnitudes produciría graves impactos directos e indirectos en la vida marina.

La zona cuenta con una de las pocas poblaciones residentes de calderón tropical del Mundo, de delfines mulares y otras veinte  especies de cetáceos, tortugas verdes y tortugas bobas, aves marinas protegidas, praderas submarinas, tiburones y calamares gigantes, entre muchas otras. Por esto, según las organizaciones ecologistas, el tráfico que provocará el puerto de Fonsalía podría generar daños y muertes a estas especies debido a las frecuentes colisiones, así como el estrés que produce por la contaminación acústica y los constantes vertidos contaminantes.

El debate tiene como objetivo abordar diferentes cuestiones como cuál es el camino correcto hacia la descarbonización de las Islas. Del mismo modo, pretende tratar la repercusión que tendrá la construcción de una central hidroeléctrica de bombeo de agua desalada en las presas de Chira, Soria y Las Niñas, situadas en Arguineguín. La previsión de este proyecto tendrá consecuencias irreversibles de carácter ambiental y afectará a cinco espacios de la Red Natura 2000, a la declaración de reserva de la biosfera y al conjunto de habitantes del propio barranco.

Antonio Morales, presidente del Cabildo, explica que «la propuesta nace bajo el amparo del programa europeo que nos ha conseguido dos subvenciones de 60 000 euros para avanzar en el desarrollo de la propuesta de una comunidad energética». Gracias al Instituto Tecnológico Canario (ITC), al Ayuntamiento de Agüimes y al empresariado localizado en el polígono de Arinaga se ha conseguido dar un paso importante en la descarbonización de Gran Canaria.

Este polígono es el mayor de la Isla con 690 empresas y una demanda que podría cubrirse por completo mediante el uso de energías renovables. Esto evitaría la emisión de 6030 toneladas de gases de efecto invernadero al año y de 19,2 toneladas de dióxido de carbono lanzadas a la atmósfera. La idea es crear una comunidad energética capaz de generar, almacenar y consumir su propia energía renovable, suponiendo un ahorro de la factura de un 40 %.

Por el momento, el proyecto se encuentra en las fases iniciales de recopilación de la información y estudios técnicos y de viabilidad por parte de diversas empresas. Para la planificación se prevé utilizar una plataforma que incorporará tecnología blockchain, machine learning y ciberseguridad, entre las diferentes herramientas con las que contará. Arinaga podría convertirse en un ejemplo a seguir para otras islas. Por ello el Cabildo pronostica la implementación de otros diez planes similares en la Isla.

Durante la limpieza se recogieron 222 kilogramos de basura en donde destacaban botellines de cerveza, garrafas de agua, neumáticos, llantas, sillas, bidones, puertas de neveras e incluso extractores de cocina. Además desde PROMEMAR destacan la recogida de 74 mascarillas que se han convertido en uno de los residuos más habituales en las limpiezas tras la llegada de la pandemia.

Toda la basura retirada ha sido clasificada y categorizada en colaboración con la asociación Vertidos Cero a través de la aplicación Marnoba. De este modo, al finalizar las recogidas de residuos anuales se obtendrá información de cuáles son los residuos más abundantes y en qué zonas se encuentran.

Con esta acción se pretende concienciar a la población de la problemática que genera el abandono de residuos en áreas como los barrancos. Cuando llueve, la basura acumulada acaba siendo arrastrada hasta mar y pasa a formar parte de los residuos marinos. Gracias a este tipo de acciones se libra a todos estos ecosistemas de los sedimentos que tanto daño provocan al medioambiente.

«La pesca es una cosa que no se va a poder evitar porque el ser humano siempre se ha nutrido del mar»

Paco González Castro es un deportista de apnea profesional. Aunque en la actualidad ya no ejerce como tal, se mantiene vinculado al mundo marino como instructor de esta modalidad en la escuela de Apnea Academy West Europe. Además de realizar excursiones en barco y otras actividades marinas, cuenta con numerosos títulos como campeón de España de apnea con el equipo canario en Barcelona en el año 2001; participante en el mundial de noviembre de 2009 en Bahamas y clasificado con el equipo nacional AIDA para asistir al mundial 2010 por equipos en Okinawa, Japón.

Comenzó su amor por el mar siendo aún un niño en el Médano, pasaba horas corriendo en la playa, jugando y observando el fondo de las aguas con un tubo y unas aletas. Cuando creció quiso ser biólogo marino, aunque al acabar la carrera no pudo trabajar de ello. «Saqué unas oposiciones a la Agencia Tributaria pero el mar siempre será mi forma de vida. Durante 27 años no almorcé ni un solo día, salía a las 15:00 horas del trabajo y prefería ir al mar antes que comer», afirma.

Paco González nació con un defecto fisiológico que acelera sus pulsaciones cardiacas por encima de lo normal. Es decir, si una persona al levantarse tiene de media entre 58 y 66 pulsaciones, él se levanta con 98, una cifra descomunal que incluso a otras personas puede provocarles taquicardias. Bromea diciendo que vino «mal hecho de fábrica», pero descubrió, hace diez años, que, después de más de un minuto bajo el agua, su corazón baja el ritmo hasta 32 pulsaciones: «El mar ralentiza todo y lo disfruto».

«Dejé de competir cuando dejé de divertirme»

El deportista supo perfectamente el momento para decir adiós a la competición y lo recuerda como si fuese ayer. «Dejé de competir cuando dejé de divertirme», asegura. En el mundial de Egipto tuvo que enfrentarse a una de las ocho pruebas diferentes que existen en el mundo de la apnea y el corazón le dio un vuelco de nervios. Afirma que fue como esperar una gran sorpresa, jamás le había pasado. Salió del agua y le dijo a su amigo Carlos: «Apunta el día de hoy, 8 de junio de 2010, nunca en mi vida volveré a competir». Y así fue.

En la actualidad, una de sus mayores aficiones es la macro fotografía marina. Durante el mes de abril mostró una exposición online en colaboración con el Ayuntamiento de Adeje llamada El mar, lo que el ojo no ve. Una colección de 29 imágenes de la biodiversidad marina. Sobre ella, dice que cada foto tiene su historia y que «me gustaría que la gente las viese y conociera las especies del mar porque es imposible verlas de otra forma».

El artista cuenta que comenzó con la fotografía en 1995 cuando aún se hacían fotos con cámaras de carrete y al revelarlas de 30 imágenes, 29 aparecían en negro y una, borrosa. El propio deportista reconoce que estaba cansado de que la figura femenina fuese la modelo en el 90 % de casos de fotografías acuáticas y quería sacar cosas que nadie nunca hubiese visto. Por ese motivo se especializó en macro fotografía para poder mostrar la diversidad de los ecosistemas marinos desde un punto de vista más cercano.

«El mar nunca tiene la culpa»

La apnea puede suponer riesgos si no se ejecuta correctamente, si no conoces tu propio cuerpo se pueden sufrir síncopes, blackout, o, incluso, lo que se conoce como samba. Paco González confiesa no haber sufrido ninguno de estos accidentes, aunque afirma que es cierto que algunas veces forzó demasiado y no se sintió bien al salir. «Si algún dia muero en el mar quiero que la gente sepa que si pasó algo fue por mi culpa, el mar nunca tiene la culpa», sentencia.

Las personas no nacen con una alimentación no cárnica, establecen este tipo de regímenes según las situaciones y experiencias que viven a lo largo de su vida. Todo ello, ligado inconscientemente a una ristra de preguntas y afirmaciones incesables por parte de la sociedad, que parece no comprender el impacto de la producción masiva. Como si dejar de consumir todos esos alimentos nos hiciera extraterrestres.

La Universidad de Luund, en Suecia, junto a la Universidad de Columbia Británica, en Canadá, han realizado varios estudios en los que se concluye que la dieta vegetariana es uno de los factores clave para poder reducir los gases de efecto invernadero. Asimismo, los datos proporcionados por la Universidad de New Hampshire, en Estados Unidos, establecen que este tipo de alimentación reducen los impactos medioambientales entre un 42 % y un 84 %.

La industria cárnica es una de las más contaminantes en el Planeta por varios factores: El agua que se consume, tanto por parte de los animales como la que se utiliza en el proceso de producción, y los gases de efecto invernadero, producidos por las flatulencias de las vacas.

«La industria ganadera genera más del 14 % de las emisiones de gases de efecto invernadero»

Según la Organización de las Naciones Unidas para la alimentación (FAO) la industria ganadera genera más del 14 % de las emisiones de gases de efecto invernadero. Esto se produce principalmente por el metano y otros gases de las flatulencias animales. Del mismo modo, la producción de este alimento contamina los suelos y las aguas subterráneas por culpa de la elevada concentración de excrementos y residuos fármacos.

Para producir un kilo de proteína animal se requieren más de 15 000 litros de agua, mientras que para la misma cantidad de arroz tan solo se necesitan 2500 litros. El gasto de agua que requieren las carnes es excesivo e insostenible en el sistema que tenemos. Alimentarse a base de cárnicos a diario, no solo no es saludable, sino que además acelera el cambio climático. Lo peor sin duda es el derroche de alimentos. Cada europeo tira al año 179 kilogramos de comida ¿para qué demandamos un nivel de productividad masiva si se va a desperdiciar?

Seamos sostenibles y ayudemos al planeta. Demandemos un sistema justo donde el consumo no vaya ligado a malgastar, sino a mejorar. Hagamos un uso responsable del agua y la energía, seamos éticos con la Tierra. Somos parte de un ecosistema y sin él, los seres humanos no tenderíamos cabida. Cuidémoslo antes de que sea demasiado tarde para hacer algo. El cambio climático es una realidad.

¿Cómo comenzó su interés por el medioambiente y el estudio de los océanos? «Desde muy pequeñito siempre he tenido contacto con el mar y con el medioambiente. Al vivir en Arinaga, en Gran Canaria, me convertí en un amante de la costa. Aunque fue cuando estudiaba en el instituto donde descubrí mi pasión por el mundo científico. Tenía claro que quería hacer una carrera de esta rama. La ULPGC ofertaba el Grado en Ciencias del Mar como única carrera dentro de esta disciplina. Así fue como empecé esta aventura».

¿Qué le llevó a querer investigar la oceanografía? «Cuando comencé la carrera me enamoré del Grado en Ciencias del Mar, pero realmente fue a partir del tercer curso cuando empezó mi pasión por la oceanografía. A partir de ahí empecé a colaborar en diferentes grupos de investigación donde podía desarrollar mis pequeños experimentos. Al acabar la carrera inicié mi andadura en la Sociedad Atlántica de Oceanógrafos. Esta entidad se dedica a promover los valores a la ciudadanía para la conservación de los océanos y nuestro medio litoral».

A título personal, ¿qué le han aportado las investigaciones y el poder salir fuera con figuras internacionales de la ciencia? «Evidentemente es algo muy gratificante, luchar por lo que amas es algo que te reconforta. Tenía claro que, al terminar mi grado, debía salir fuera. Bajo mi punto de vista, ir al extranjero hace crecer al alumnado a nivel particular y profesional. Yo crecí muchísimo al estar en ambientes internacionalizados y laboratorios donde eres la única persona que habla español. Ha sido toda una experiencia ya que me ha permitido conocer culturas, sociedades y, lo más importante, personas».

«El medioambiente no se recupera en dos días ni en un mes»

¿Considera que la ciudadanía está concienciada de los problemas medioambientales? «Sin ninguna duda, yo creo que el medioambiente ya forma parte del discurso diario de las personas. La  juventud cada vez está más formada. Sin embargo, creo que se necesita mucha más educación real, con veracidad y rigor. Vivimos en la sociedad con mayor acceso a la información de la historia, pero con las generaciones con menos capacidad de contrastar esos datos. Entonces, creo que sí que existe una preocupación por la naturaleza, pero no conforma una prioridad en la vida de la gente».

¿Cree que estos problemas han mejorado o, por el contrario, empeorado por culpa de la pandemia? «Es comprensible que ante una situación como la que tenemos ahora, de crisis sanitaria y económica, la gente esté más preocupada del impacto diario. El mensaje claro que tiene que tener la ciudadanía es que, cuando hablamos de naturaleza y calentamiento global, no podemos pedir soluciones a corto plazo. El medioambiente no se recupera en dos días, ni en un mes, esas acciones se revierten a largo plazo. Nos hemos acostumbrado a vivir en la inmediatez y tenemos que modificar esa mentalidad».

¿Cree que se llevan a cabo las medidas necesarias por parte del Gobierno de Canarias para erradicar estas cuestiones medioambientales? «El mensaje político ha cambiado en los últimos años. Esto ha sucedido no solo por la implicación de la sociedad, sino porque Europa así lo ha dictado. Además, honestamente, esto también genera votos, por lo que a los partidos políticos les interesa. Sin embargo, he comprobado que en los últimos años se pone un montón de dinero e intenciones, pero la ciudadanía no siente que se hagan cosas porque el sistema burocrático es muy lento. Necesitamos agilidad para que no se quede todo en intenciones e inversiones».

«Estamos a tiempo de revertir los impactos pero tenemos que cambiar nuestra mentalidad»

¿Estamos viviendo ya las consecuencias del cambio climático? «A ciencia cierta, no es algo que llegará en cien años, llevamos padeciéndolo décadas, y para comprobarlo solo hay que hacer uso de los datos científicos. En Canarias ya estamos sufriendo sus efectos y lo podemos ver en la variación de especies que tenemos en el océano, el incremento de las temperaturas, la humedad de nuestras medianías, los cambios en agricultura y los incendios por la calidad de nuestros suelos».

¿Cuáles son los factores más contaminantes en nuestras Islas? «En Canarias, las dos principales emisiones de gases de efecto invernadero que producen problemas ambientales la conforman la generación eléctrica, para que tengamos luz en casa, y el trasporte en carretera. Un acto tan simple como usar el transporte público reduce, en gran medida, nuestra huella de carbono. Todo lo que hagamos para reducir dicha cifra será bienvenido».

¿Qué le diría a aquellas personas que consideran que el cambio climático no existe? «En primer lugar, la ciencia solo habla a partir de los datos claros. La historia de la Tierra nunca ha tenido un cambio en la misma escala temporal como el que hemos creado los seres humanos en los últimos 200 años. Cuanto más degrademos nuestro medio natural, peor será nuestra calidad de vida. Por ejemplo, la calidad del aire mata a muchas personas en España cada año. Por su parte, la biodiversidad marina puede acabar con un recurso esencial de alimentación como son los peces».

¿Iremos hacia un desastre inevitable de no producirse una variación a tiempo? «El ser humano es solo una parte de los ecosistemas de la Tierra, no es esencial. En caso de seguir así, estoy convencido de que el planeta tiene muchísimos años para autorregularse y, del mismo modo que ha habido otras extinciones masivas, nuestra especie puede provocar otra. Estamos a tiempo de revertir parte de estos impactos. Aunque también tenemos que cambiar nuestra mentalidad, porque esto no es sostenible».

La Organización  manifiesta que esta planificación supondría la destrucción de más de 200 kilómetros cuadrados de territorio virgen y que, si este proyecto sigue adelante, cinco de los espacios naturales que se incluyen en la Red Natura 2000 se verán degradados, así como la fauna y las especies del territorio. Además, denuncia que más de 2500 habitantes se verían afectados por las obras diarias, que podrían durar más de seis años.

La asociación Salvar Chira-Soria ya compareció el pasado mes de marzo ante la Comisión de Transición Ecológica, Lucha contra el Cambio Climático y Planificación Territorial, a propuesta del Grupo Nacionalista NN-PNC del Parlamento de Canarias. Allí expusieron la demanda ciudadana de rechazo a este plan, basado en la falta de estudios económicos que puedan justificar inversiones superiores a los cuatrocientos millones de euros, así como la falta de estudios científico-técnicos.

La Agrupación pide a la sociedad su máxima implicación y la participación activa para conservar el terreno natural que alberga innumerables valores arqueológicos. La plataforma expone que 4000 kilos de dinamita diaria durante seis años «es un infierno».

Esta planificación tiene el objetivo de dar a conocer los indicadores que reflejan la totalidad de gases de efecto invernadero emitidos, así como los que definen el volumen total de agua dulce utilizado para producir los bienes y servicios. Del mismo modo se prevé desarrollar un proyecto de estimación tanto de la huella de carbono como de la hídrica.

El curso será impartido por Juan Carlos Santamarta, profesor en Ingeniería Agraria, Náutica, Civil y Marítima de la ULL. En 2018 recibió el Premio de Investigación Agustín Betancourt por su trabajo Minería del agua en islas y terrenos volcánicos. Noelia Cruz, investigadora de Ingeniería Agraria, Civil, Náutica y Marítima de la ULL, se encargará de dirigirlo. En su recorrido destaca la participación en diversos proyectos europeos relacionados con el medioambiente y la gestión eficaz de recursos en las Islas.

Santamarta ha explicado con anterioridad que tanto el turismo como la agricultura son actividades fundamentales para Canarias que generan un consumo de agua y energía excesivamente elevado. Con este curso se pretende hacer llegar al estudiantado los conocimientos necesarios para calcular los niveles de las huellas de carbono e hídricas, fomentando la eficiencia en el Archipiélago.

La jornada dio comienzo a las 18:00 horas con la intervención de Humberto Domínguez, presidente de la Federación Insular de Montañismo de Tenerife, quien se encargó de recordar la presencia de montañistas y escaladores en este tipo de parajes, además del uso que hacen de este entorno como soporte deportivo. Recalcó, del mismo modo, la labor importante que debe ejercer la ciudadanía para una buena conservación del área y para el disfrute de todos y todas.

Wolfredo y Victoria, que guían desde hace años la realización de proyectos para la conservación del medio natural, centraron la charla en las agrupaciones arbóreas que caracterizan al Bosque del Adelantado, contando casi una veintena. Dentro de las más destacadas se encuentran: el laurel, el palo blanco, el viñátigo o el brezo canario, clases autóctonas reconocibles en esta zona de monte verde. Por otro lado, entre la vegetación invasora destacan principalmente el acanto y la cresta de gallo de El Cabo.

La irrupción de la flora exótica frente a las naturales de Canarias supone uno de los mayores problemas del territorio. Esto sucede debido a que los bosques se deben aclarar para aumentar la disponibilidad de luz solar y las posibilidades de nutrición de la vegetación. En este proceso se pierde gran parte de las arboledas, lo que permite la entrada de plantas exóticas. Con este motivo, Victoria Eugenia realiza actividades para su alumnado del grado de Ciencias Ambientales de la Universidad de La Laguna de desintoxicación de especies procedentes de otros territorios, fomentando el cuidado de la naturaleza propia.

La Asociación de Empresarios Turísticos de Fuerteventura (ASOFUER) ha instado a declarar esta iniciativa de interés general, sustentando esta opinión en la posibilidad de un nuevo foco de interés turístico para las Islas, debido también a la buena conexión entre ellas. Además, esta declaración autorizaría al empresariado a beneficiarse de las subvenciones del Fondo de Reactivación Social y Económica, el Plan Next Generation.

Sin embargo, el Cabildo Insular de Fuerteventura ha considerado que la localización escogida no es la adecuada, al encontrarse tan cercana a un espacio autóctono protegido. Los promotores encargados de Dreamland Studios afirman haber escogido como primeras opciones localidades como Adeje, Tenerife o Juan Grande, Gran Canaria, al igual que otras poblaciones majoreras como es el caso de Caleta de Fuste. Pese a ello, no se dieron las circunstancias adecuadas para llevarse a cabo en otros terrenos y aseguran que el suelo se escogió bajo criterios técnicos, medioambientales y de acceso al establecimiento.

El plan, que ya ha obtenido el informe de la Consejería de Ordenación del Territorio y el informe jurídico, ha generado bastante polémica y ha provocado la puesta en marcha de una campaña de recogida de firmas en contra del mismo.

«Una idea de tales magnitudes llevaría a la extinción de especies endémicas, a la destrucción del paisaje y de la propia naturaleza»

Por otro lado, Antonio Hormiga, presidente de ASOFUER, asegura que este impulso dará lugar a un cambio en la economía majorera, ofreciendo alternativas que posibiliten un turismo de calidad. En contraposición, Agonane Ben Magec, perteneciente al colectivo Ecologistas en Acción, recuerda que la administración pública debe defender el bien común y no gestionar proyectos privados a costa de valores rústicos y naturales. De la misma manera lo manifiesta la plataforma ciudadana Salvar El Cotillo, que considera el proyecto de «una aberración a nuestro territorio».

La inversión prevista para Dreamland es de más de 100 millones de euros y se cree que generará aproximadamente 400 puestos de empleo directos y casi 2 000 de forma indirecta. De cumplirse los plazos establecidos y contar con los apoyos necesarios, el plan se llevaría a cabo en el año 2022.