Debemos aceptar que todo lo bueno se acaba, y ese es el caso de una generación de grandes deportistas. Todos pensamos en Messi y Cristiano, que han sido referentes de una enorme cantidad de personas, pero sus ciclos están acabando. Ya los medios no hablan de ellos, y si lo hacen es solo para reconocer su bajón. Y es que los años pasan, tengamos millones en el banco o no.
Por esto, aparecen nuevas estrellas que ocupan el foco mediático como podría ser Pedri González, Golden Boy con tan solo 18 años, y que augura un futuro excelente para el fútbol canario y nacional. De hecho, podríamos considerarlo como la estrella de España para este Mundial de Catar en 2022. Aceptando esto, dejamos atrás grandes estrellas como Pedro Rodríguez o David Silva, jugadores que pertenecieron a la época de oro de la Selección Española, y que han significado mucho para la historia del deporte español.
«Los años pasan, tengamos millones en el banco o no»
También tenemos que aceptar este cambio en otros deportes, por ejemplo, el que podría ser el mejor deportista español de la historia, Rafael Nadal, el tenista con más Grand Slam, y que este domingo, a pesar de tener 36 años, conquistó su decimocuarto Roland Garros. Podríamos decir, con respeto al gran tenista Novak Djokovic, que su mayor competencia será Carlitos Alcaraz, que con tan solo 19 años ya es top seis del ranking mundial, nombrado ya como el nuevo Rafa Nadal.
En baloncesto femenino, Laia Palau acaba de anunciar su retirada con 42 años, es la persona que más veces ha vestido la camiseta de la selección de baloncesto tanto femenino como masculino (315). La subcampeona del mundo y olímpica debe estar tranquila, ya que María Conde e Irati Etxarri pisan fuerte en el clasificatorio al Eurobasket2023 para cubrir este relevo generacional.
Podríamos analizar muchos casos más, pero no me daría para solo este artículo, por lo que debemos apreciar el talento que está por venir, que es bastante. Y no solo eso, estemos tranquilos porque queda mucho deporte español, y esperemos que traiga consigo muchos triunfos que celebrar. Para conseguir esto, digamos adiós a Pedro y hola a Pedri.
