Overwatch cuenta actualmente con varios tipos de competiciones en el mundo de los eSports, como la liga o la copa mundial. La mayoría de los jugadores empiezan como aficionados en la Open Division, a partir de la cual pueden escalar hasta los torneos de nivel profesional mencionados. Ayer 15 de febrero comenzó la esperada segunda temporada de la Overwatch League, que cuenta con varias novedades respecto a la anterior. No obstante, la nueva empieza más de un mes después que la primera, hecho que puede afectar a la Overwatch World Cup de este año.
Tradicionalmente, la final de la copa mundial del videojuego se lleva a cabo a principios de noviembre, por lo que las fases previas comienzan a mediados de agosto. Esto no había sido un problema hasta ahora, pues la primera temporada de la Liga se desarrolló entre el 11 de enero y el 28 de julio, y por lo tanto no se solaparon. Dado que este año ha comenzado el 15 de febrero y la cuarta fase no termina hasta el 25 de agosto, lo más probable es que se extienda hasta el mes de septiembre, en el que se disputarían las partidas finales.
Así pues, es factible que Blizzard se plantee atrasar la OWWC como mínimo unas semanas. La falta de información oficial es un contratiempo para los posibles patrocinadores como Toyota o las casas de apuestas actualmente centradas en la OWL, donde, según el portal Betway Esports, New York Excelsior es el gran favorito para hacerse con la victoria, con una cuota de 3,50 este pasado 8 de febrero. No obstante, esto no asegura a los jugadores que se apueste por ellos en la OWWC, pues los casinos especializados aún no están mostrando cuotas para la competición.
La importancia de la OWWC
Si bien no debería haber ningún problema para que la copa se celebre, hay que tener en cuenta que si los equipos no pueden prepararse correctamente, no podrán ofrecen el nivel que la audiencia espera de ellos. Por otro lado, los ganadores estarán más cansados que los que hayan perdido en las primeras fases, lo cual podría provocar sorpresas en los resultados. Frente a esta situación, los espectadores y las empresas esperan que Blizzard haga un comunicado pronto.
La Overwatch World Cup del año pasado fue uno de los mayores eventos de eSports del 2018, con una media de 1 600 000 espectadores durante las finales, tal y como afirma el portal de estadísticas de streamings eSports charts. El campeonato fue emocionante y estuvo repleto de adrenalina pero el vencedor no sorprendió a nadie. Por tercer año consecutivo, Corea del Sur se llevó el trofeo con una merecida victoria. En esta ocasión, se enfrentó a China al mejor de siete, obteniendo un 0-4 que dejó a su contrincante sin posibilidades.
La dificultad de ser profesional de Overwatch
Los surcoreanos no destacan únicamente en la OWWC, pues el vigente ganador de la liga, el equipo London Spitfire, está integrado por jugadores de dicha nacionalidad. No hay duda de que Corea del Sur es la sede de los mejores profesionales de Overwatch, pero poco a poco el resto se aproxima. España, por ejemplo, aún tiene un largo camino que recorrer pero ya cuenta con algunos profesionales de los eSports. Convertir la afición por los videojuegos en un trabajo es muy complejo y requiere un gran número de horas.
Para evitar que el cuerpo de los jugadores profesionales se resienta, estos suelen seguir una rutina estricta. Van al gimnasio, cuidan sus hábitos, entrenan sus reflejos y siguen una dieta determinada. Esta exigente forma de vida es otra de las razones por las que se espera un mínimo tiempo de descanso entre la OWL y la OWWC. Si no lo hubiese, el descontento también podría traducirse en una menor compra de entradas por parte del público. En estos momentos, Overwatch rivaliza con grandes títulos de eSports como Fornite, que recibió varios galardones en los Games Awards 2018, por lo que no puede permitirse ningún desliz.