El año 2018 recién finalizado se resume, según Greenpeace, en líneas generales, en el ascenso de los líderes populistas que amenazan, destaca la ONG, el Acuerdo de París, el cual, en 2016, supuso el primer acuerdo global para atajar el calentamiento desencadenado por el hombre con sus emisiones de gases de efecto invernadero. Además, en el ámbito nacional, la organización ecologista señala como lo mejor de 2018:
♦ Carbón. Iniciación de la Alianza Un Futuro Sin Carbón y la salida a la calle en 21 movilizaciones ciudadanas por toda España para pedir el fin de este combustible fósil antes de 2025.
♦ Energías renovables. Participación, junto a 500 organizaciones y particulares, en el primer molino eólico comunitario del Sur de Europa, el cual abastece sus oficinas.
♦ Movilidad sostenible. Puesta en marcha de Madrid Central, un proyecto para reducir la contaminación ambiental y el tráfico motorizado en el centro de la ciudad.
♦ Energía ciudadana. Creación del primer mapa de iniciativas de participación ciudadana en energías renovables creado junto con la Fundación Fiare.
♦ Incendios. Ayuda de la Comunidad de Madrid a pequeños municipios a elaborar planes de evacuación. La Fiscalía de Medio Ambiente ha enviado un requerimiento a los ayuntamientos para recordar que los planes de preventivos y de emergencia son obligatorios.
♦ Cetáceos. Creación de un gran corredor como Área Marina Protegida en el Mediterráneo libre de extracciones de gas y petróleo que protegerá las migraciones de cetáceos.
♦ Posidonia. Aprobación del Decreto sobre la conservación de la Posidonia en las Islas Baleares que protege 650 kilómetros cuadrados de esta planta marina.
♦ Ganadería. Aumento de los apoyos contra la ganadería industrial, con más de 30 plataformas y organizaciones activas.
♦ Cierre de Valdemingómez. Anuncio del cierre de la incineradora de Valdemingómez para 2025. La Alianza Incineradora de Valdemingómez NO, de la que forma parte Greenpeace, ha sido vital para conseguir esta decisión.
Por su parte, en el ámbito internacional resume lo mejor en:
♦ Renovables. La nueva Directiva europea de Renovables aumenta hasta el 32 % el objetivo de energías renovables de la Unión Europea (UE) para 2030 y consagra el derecho ciudadano a la autoproducción de energía renovable sin trabas.
♦ Cambio climático. La Comisión Europea propone reducir las emisiones europeas a cero para 2050.
♦ Antártida. Greenpeace realiza una expedición histórica para reclamar la creación del mayor santuario del mundo en aguas antárticas.
♦ Fin de la pesca de kril. El 85 % de la industria pesquera de kril se compromete a dejar de pescar en las áreas ecológicamente sensibles del océano antártico.
♦ Biodiversidad. Los gobiernos europeos respaldan la propuesta de la Comisión Europea para prohibir casi totalmente el uso al aire libre de tres insecticidas neonicotinoides especialmente peligrosos para las abejas.
♦ Plásticos. La Comisión Europea ha aprobado la primera Directiva en el Mundo que reduce los plásticos de un solo uso.
♦ Envasado. Más de dos millones de personas han pedido a los supermercados que eliminen el sobre envasado y los plásticos de un solo uso.
♦ Consumo. Protestas alrededor del mundo empujan a Samsung a comprometerse a usar energía 100 % renovable.
Comercio de armas y entrada de madera ilegal a España
Respecto a lo peor de este año en España, el análisis de Greenpeace alega «un recorte del 56,6 % del presupuesto destinado a medioambiente en los últimos diez años». Del mismo modo, la entidad demuestra que los españoles pagan 18 millones de euros que son destinados a subvenciones de «energías sucias». También, establece una aproximación de un millón de pozos de agua ilegales en la actualidad.
Greenpeace denuncia «la dejadez de las administraciones públicas ante la entrada de madera ilegal, el mayor delito medioambiental a escala global, en España. También, es especialmente grave la permisividad de la Xunta de Galicia y la entrada de madera de sangre de Brasil a través del puerto de Vigo». Asimismo, destaca que prosigue el comercio de armas del anterior Gobierno.
En cuanto a las costas españolas, subraya que el 80 % de los recursos ambientales de estas áreas están degradados tras treinta años de urbanización masiva. A esto se suma la autorización de pesca del coral rojo, en peligro de extinción, por parte del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
Bloqueo al Santuario Antártico
Respecto al ámbito internacional, Greenpeace denuncia la vinculación del BBVA con la destrucción provocada por la industria petrolera en Canadá. Por otra parte, «las compañías propietarias de centrales de carbón son responsables de costes sanitarios de 22 000 millones de euros en Europa».
Otro aspecto que destaca es el bloqueo de la creación del Santuario Antártico por parte de China, Rusia y Noruega. Además, la investigación llevada a cabo por la expedición de Greenpeace encuentra plásticos y sustancias químicas peligrosas en el agua y la nieve de la Antártida. Asimismo, Japón anuncia su intención de volver a la caza de ballenas en sus aguas territoriales.
La deforestación ilegal a gran escala en Borneo (Indonesia) para el aceite de palma fue otro de los temas más denunciados por Greenpeace.
