PERIODISMO ULL se hacía eco este pasado martes de un presunto abuso sexual por parte de un alumno de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria hacia otra estudiante. Ella decidió denunciar lo sucedido en la Residencia Universitaria de Tafira, lo que originó que la Policía Nacional detuviese al supuesto agresor. Ahora, la víctima ha decidido romper su silencio con la finalidad de contar cómo se siente. También quiere animar a otras chicas a que no se censuren a sí mismas ante estos casos.
¿Cómo te sientes? “Ahora mismo estoy súper desganada. Siento que no soy yo. A ratos quiero desaparecer, aunque en otros momentos necesito que alguien esté conmigo. Es un poco complicado tener que vivir en la Residencia. La gente sabe lo que me pasó y sí, muchos están conmigo y me apoyan, pero hay gente que no y las miradas y murmullos también me afectan”.
¿Cómo crees que actuará la Justicia en este caso? “Solo espero que mi agresor reciba un castigo. Dirán que no es para tanto ya que no se consumó la violación y él iba bebido, pero eso no es excusa”.
“Si nos callamos le damos más poder a gente de este tipo”
¿Consideras que alzar tu voz ayudará a otras jóvenes? “Espero que las chicas denuncien cada vez que les pase algo parecido o lo mismo porque, si nos callamos le damos más poder a gente de este tipo y les animamos a que lo sigan haciendo. Eso sí, nunca se puede mentir en nada. Hay que ir, siempre, con la verdad por delante”.
¿Quieres añadir algo más? “Ya me callé muchas cosas en el pasado por ser menor de edad y no querer preocupar a mis padres. Pero basta ya. Tolerancia cero”.