El Consejo de Gobierno de la Universidad de La Laguna destacó hoy 31 de octubre el déficit formativo de partida de su alumnado, especialmente en materias como física, matemáticas o dibujo técnico, así como carencias en determinadas competencias transversales básicas tales como comunicación oral, comprensión lectora o redacción. Para paliarlo, se aprobó la puesta en marcha de un plan de medidas de mejora del rendimiento académico, alternativas al abandono temprano y dominio y conocimiento de lenguas extranjeras, por un total de 25 votos a favor, uno en contra y seis abstenciones.
Se trata de un texto que da cumplimiento al acuerdo de financiación suscrito con el Gobierno de Canarias en diciembre de 2016 y en el cual se le proponía a las instituciones de educación superior de las islas que elaboraran estrategias para mejorar la eficiencia de sus estudios.
El documento ha sido promovido por los vicerrectorados de Estudiantes y Docencia, con la colaboración de la Unidad Técnica de Calidad. Cuenta con 16 grandes propuestas de mejora, que luego se desglosan en un número importante de acciones para producir el cambio, con unos plazos concretos de ejecución para llevarlas a la práctica.
El documento parte del diagnóstico y de los resultados de la implantación y evaluación de las titulaciones de la ULL. Aunque el plazo de ejecución en algunos casos se señala para el curso 2018-2019, estas acciones han comenzado a trabajarse desde este curso académico, adelantó la vicerrectora de Docencia, Ana Isabel Jiménez.
Otro problema se centra en que hay estudiantes que eligen un grado teniendo poca información sobre las exigencias académicas y su perfil profesional. Esta situación se agrava cuando el estudiante acaba en una carrera que no es la elegida en primera opción, lo que origina mayor desmotivación, y por lo que se requiere, apunta el informe, más coordinación con la Enseñanza Secundaria.
En algunas titulaciones de grado los contenidos de las asignaturas de formación básica de rama no se ajustan al perfil de la titulación, debido a las exigencias de las directrices generales para el diseño de títulos de grado de la ULL en el momento de su aprobación. De hecho, durante la implantación de los mismos, se ha visto la necesidad de flexibilizar dichas exigencias en lo referido a la estructura de los títulos, para adecuarlas a los perfiles de egreso. Muchos de ellos están ya trabajando en este aspecto.
Escasa formación del profesorado en la docencia en inglés
Otra de las carencias detectadas es la escasa formación del profesorado en la docencia en inglés y en las metodologías docentes vinculadas al Espacio Europeo de Educación Superior, especialmente para trabajar con grupos de tamaños diversos. El plan de formación interna del profesorado contempla ya estas deficiencias, aunque parece que hay que reforzarlo en los ámbitos descritos.
También se ha se ha identificado, en algunos casos, confusión en la definición de los tipos de evaluación (continua y final), por lo que en algunos centros existe cierta heterogeneidad en los criterios y sistemas de evaluación así como en sus formas de aplicación. La vicerrectora señaló que hay que seguir trabajando para que la evaluación continua sea el modo general de evaluación en toda la Universidad.
El informe indica también que en el análisis de los datos de rendimiento académico se observan asignaturas que presentan un número elevado de suspensos o de no presentados, lo que hace que se incremente la duración media de los estudios e incluso el abandono. Sucede igualmente que, en otras asignaturas, se producen tasas de éxito del 100 %. En opinión de la vicerrectora, hay que analizar uno y otro caso y realizar un estudio más pormenorizado de la carga de trabajo de los estudiantes, buscar una mayor coordinación entre todas las materias de un curso y que ello sea asumible por parte de los alumnos.
Ofertas de plazas docentes
En otro orden de cosas, el Consejo de Gobierno dio su visto bueno a la ampliación de la oferta de empleo público para el personal docente e investigador del centro académico en 2017. Así, si ya había un total de 18 plazas aprobadas, se extiende ahora a 21 plazas más, desglosadas en 13 cátedras de universidad por promoción interna, dos más del mismo tipo de acceso libre y seis de profesorado contratado doctor.
El órgano de Gobierno de la Universidad además, conoció y aprobó en la sesión de hoy los criterios generales de presupuestación del ejercicio del año 2018, con la idea de que en el mes de noviembre de debata en este mismo seno el texto presupuestario que guiará las líneas de gastos de ingresos del centro académico.