El CC Amigos de Copete cayó derrotado en los cuartos de final del Trofeo Rector Intercentros de fútbol sala el pasado martes, 12 de marzo, ante el PAS ULL en el Polideportivo Central con un agónico resultado de seis a cinco. El partido fue emocionante hasta sus últimos instantes, con numerosos goles y una acción en el final del mismo que decidiría el encuentro.
Tras el pitido inicial, el PAS ULL marcaría el ritmo del enfrentamiento desde un inicio, apoderándose de la posesión del balón durante todo el encuentro y basando su juego en pases rápidos y combinaciones de no más de dos toques. Transcurridos apenas dos minutos de partido, llegó el primer gol de los locales tras un pase proveniente de una falta ejecutada con rapidez, pillando por sorpresa a los jugadores del CC Amigos de Copete.
A pesar del temprano gol del PAS ULL y su estilo de juego dominante, el equipo visitante supo mantener las formas y seguir su plan de juego, esperar replegados atrás al rival y lanzarse al contraataque. Esta estrategia no tardaría en dar sus frutos, y tras un robo en propio campo, Joan Palací anotaría el gol del marcador. Los minutos pasaban y los equipos continuaban fieles a su planteamiento con ocasiones para ambos.
Sin embargo, serían los locales quienes volverían a introducir el balón en la red en tres ocasiones más hasta el final de la primera parte, todos ellos tras buenas y rápidas combinaciones con las que superaban con facilidad a sus rivales.
«La acción del penalti es una verdadera pena»
Tras el descanso, el resultado de cuatro a uno se antojaba difícil de afrontar para los visitantes, pero supieron ser asertivos de cara a puerta y establecer de nuevo el empate gracias a los goles de Ricardo Puentes y de Javier Padrón por partida doble. El cansancio físico se dejaba notar en los jugadores, lo que propició que los porteros de ambos equipos se lucieran con numerosas paradas, sobre todo el guardameta del CC Amigos de Copete que realizó intervenciones salvadoras.
En los últimos instantes de la segunda parte el partido se terminó de romper completamente, teniendo como consecuencia un gol para cada equipo fruto de pérdidas de balón en la defensa. Con el cinco a cinco en el marcador y en la última jugada, sucedió lo imprevisible. Una mano clara dentro del área del equipo visitante fue señalada como penalti y aprovechada por el PAS ULL para establecer el seis a cinco final, y certificar su pase a las semifinales de forma agónica.
Las sensaciones del conjunto visitante tras la derrota eran de tristeza por el desenlace final que tuvo el partido. Ricardo Puentes declaró: «La jugada del penalti es una pena, estaba justo detrás para cortar el balón, pero llegó antes la mano de mi compañero, es una verdadera lástima». La siguiente ronda del torneo tendrá lugar el próximo martes, donde los cuatro equipos restantes se enfrentaran por llegar a la ansiada final.
