Soy una actriz muy apasionada y a la que le encanta su profesión. Paola Bontempi define con esta frase, a modo de reflexión, su personalidad y el lazo que le une a la interpretación. A lo largo de su trayectoria, ha participado en numerosos proyectos televisivos como Glow and darkness o La que se avecina; en películas como El ataúd de cristal o La isla interior y ha trabajado en varios cortometrajes y obras teatrales. El pasado mes de marzo estrenó Nacho, una serie original de Atresplayer Premium, protagonizada por Martiño Rivas, que narra los inicios de Nacho Vidal en el cine para adultos.
Bontempi recuerda que su vocación para actuar se fue despertando desde que era una niña. «Empecé mostrando algunos indicios. Cuando tenía cinco años le dije muy convencida a mi padre que quería salir en la televisión y me fascinaba ir a ver el circo», señala. A partir de los once años, comienza a formarse con distintos cursos que la introdujeron en el arte dramático.
«Hay varios proyectos que han dejado huella en mi vida»
Piensa que su carrera ha sido «lenta pero constante» ya que considera que ha recorrido el camino como una hormiga: «Desde que era muy joven me fui a estudiar a Londres y a Los Ángeles y ya llevo más de veinte años en Madrid. Ha sido un proceso de subir las escaleras pasito a pasito». Si tuviera que destacar algún aspecto de su carrera, no duda en poner en valor todos los proyectos que la han marcado, dejándole una gran huella tanto en lo personal, como en lo profesional.
La serie Nacho es el trabajo más reciente de la actriz. La ficción, basada en la vida de Nacho Vidal, muestra las luces y las sombras de la industria de la pornografía y sus comienzos en España. Recuerda que hizo varias pruebas y que uno de los puntos para decantarse por el proyecto fue Bambú, su productora: «Me dio mucha confianza las series que tienen a sus espaldas, su gran visual y su forma de trabajar. Sabía que iban a hacer algo espectacular».
Explica que «antes de que se estrenara la serie, quizás había cierto morbo por que Nacho Vidal fuese el eje conductor», pero piensa que existen otros aspectos que sorprenden, como el enfoque de las tramas o el dinamismo.
La tinerfeña interpreta a María Bianco, una actriz, directora y productora de cine porno. «Todos los papeles están inspirados en personas reales, a modo de referencia, pero al interpretarlos son muy diferentes», afirma. En cuanto a su personaje, desvela que le atrajo «que fuera una mujer con mucho poderío, ejecutiva, fuerte y sumamente sexual, desde el punto de vista del disfrute».
«He tenido que romper mis tópicos con el cine porno»
A la hora de ponerle voz a su personaje y de enfrentarse a la serie, la actriz indica que ha tenido que superar una serie de prejuicios respecto al cine para adultos. «En Nacho no hacemos pornografía, pero sí la interpretamos», sentencia. Asimismo, desvela que ella era la primera que tenía tabúes con el porno y que ha tenido que romperlos. «Fue una forma de quitarme prejuicios que tenemos todas las personas», añade.
«Una serie como Nacho requiere muchas partes subidas de tono», narra. El rodaje del proyecto contó con la figura de la coordinadora de intimidad, que ha ayudado en las escenas de sexo. Bontempi indica que «es un rol novedoso en España y que ha sido bastante importante», ya que da la confianza de estar en un entorno protegido y tranquilo. «Siempre me preguntaba con qué no me sentía cómoda o hasta que punto quería llegar y, eso, es de agradecer», añade.
«La gente no esperaba el dinamismo de la serie»
La actriz comenta que «el proyecto está teniendo una buena acogida, tanto en nuestro país, como en Latinoamérica» ya que cree que la gente no se esperaba que fuera tan dinámica y divertida. Además, desvela que, para ella, el punto fuerte del proyecto es el ritmo, el entretenimiento y la capacidad de generar morbo sin caer en lo obsceno.
En cuanto a proyectos futuros, cada domingo se estrena un nuevo capítulo de Nacho y la actriz desvela que, este año, se mantendrá en el mundo de la ficción. «Estoy preparando una serie nueva para este año, pero no puedo adelantar mucho», concluye.