El director español Carlos Saura fue homenajeado este pasado viernes, 10 de marzo, en la III Muestra de Cine Español celebrada en los Multicines de La Laguna. El evento consistió en la proyección de una de sus primeras películas, La caza, y una masterclass impartida por Gonzalo Pavés, Doctor en Historia del Arte y profesor de la Universidad de La Laguna, quien afirmó que «Saura es una de las personalidades más importantes dentro de la gran pantalla española».
El evento comenzó con el visionado de Cloro, un cortometraje de producción canaria dirigido por Pablo Borges que habla sobre la heridas sin sanar y sobre historias prohibidas, que no deberían estarlo. Borges agradeció a la Muestra conceder este espacio a los cineastas locales.
Tras el cortometraje, se proyectó la película, La caza, como homenaje a Carlos Saura y con el objetivo de acercarlo a las nuevas generaciones. La película narra la historia de cuatro amigos que van de caza a la sierra de Toledo y recuerdan hechos del pasado que tuercen su amistad. Entre los protagonistas del filme podemos encontrar a Ismael Merlo, Alfredo Mayo, José María Prada y Emilio Gutiérrez Caba. Además, la película tiene como reconocimiento el Oso de Plata a mejor director.
El broche final de la III Muestra de Cine Español de Tenerife estuvo de la mano de Gonzalo Pavés. El profesor concluyó el evento con una masterclass sobre la gran figura de Carlos Saura, donde hizo un pequeño recorrido por su vida y explicó sus contribuciones al cine español.
Pavés contó cómo fueron los comienzos de La caza y relató que Carlos Saura escribió el guion y fue por todas las productoras españolas pero nadie confiaba en ese proyecto. Al final, un productor guipuzcoano llamado Elías Querejeta apostó por él y le dio tan solo un millón de pesetas. «Su padre tuvo que poner otro millón, aunque no estaba muy convencido», comentó.
Pavés mencionó una pequeña anécdota del rodaje de esta película: «Rodó el guion desde el principio al final, en lugar de lo que se suele hacer habitualmente, donde se alternan escenas sin guardar ninguna lógica cronológica». Añadió que, de esta manera, se guardaba las espaldas ante una posible intervención de producción en la película.
«En sus películas utilizaba un lenguaje muy irónico y críptico»
Además, el profesor también destacó el modo que Saura tenía de expresarse en el cine. «Utilizaba un lenguaje muy hermético, irónico y críptico», declaró. Asimismo, recalcó que si las personas empiezan a profundizar en las películas de Saura se pueden encontrar un gran trasfondo para evitar la censura que existía en la España franquista.
Pavés transmitió, por último, una de las mayores quejas de Saura. «Sin los franceses y sin los alemanes, él no hubiera podido hacer cine», comentó. Con esto, quiso explicar que el director solo se había sentido reconocido fuera de nuestro país, porque si fuera por los españoles, solo hubiera rodado Los golfos, su ópera prima.