Refugiadas climáticas, la primera película animada de la productora canaria Tinglado Film, fue seleccionada hace pocos días como la única propuesta española en competición para el mercado MIFA del Festival Annecy en Francia, el más prestigioso del Mundo en materia de animación. Su director, David Baute, narra en este largometraje la historia de tres mujeres que han perdido todo debido al cambio climático y que emigran para emprender una nueva vida. Baute además dirige cada año el Festival de Cine Medioambiental de Canarias y colabora en el certamen MiradasDoc, que busca premiar a los documentales más punteros de las Islas.
¿Cómo recibió la noticia de que Refugiadas climáticas haya sido seleccionada para el mercado de Annecy? «Con una alegría tremenda porque era algo que no esperábamos realmente ya que son una referencia a nivel mundial a la que tú a veces envías proyectos por enviarlos casi. Que nos saquen ahí a nosotros, que somos una productora pequeña que se dedica al cine documental y no habíamos tenido antes esta experiencia de la animación, pues la verdad es que lo cambia todo. Para cada proyecto supone un impulso muy grande».
¿Cree que esto puede ofrecer una mayor difusión internacional a las productoras y al cine canario en general? «Seguro que sí. De entrada ya cuando sacaron la lista nombraron el sitio de procedencia de cada proyecto y en eso se fija mucho la gente. Contar en el proyecto con una película canaria nos hace crecer. Primero, porque la calidad de los proyectos va mejorando muchísimo y eso hace que los interesados en lanzar alguna producción se fijen en ese tipo de productos y ya vas marcando un nivel. Y después se conoce la marca canaria a nivel internacional».
¿Cómo ha sido la experiencia en el ámbito de la animación? «Este sector lo integra un grupo de personas muy amplio. A mí, que vengo de otro campo, me parece increíble toda esa coordinación que hay entre tantos trabajadores. Que uno hace tal detalle de la imagen, el otro se dedica a los personajes, el otro a los movimientos de la cara, el otro a los fondos y los paisajes que hay detrás… A mí me pareció una obra de arte brutal ese trabajo».
¿Y qué tal trabajando junto a profesionales como José Sánchez Alonso o Diego Navarro? «Pepe Sánchez Alonso es como una referencia en la ilustración en España. Es cierto que hoy en día se trabaja cada vez más el 3D y el 2D, pues el dibujo más tradicional ya se ha quedado un poco fuera. La idea clave era trabajar con alguien que viniera de esa línea y él y su equipo son muy buenos para eso. Y luego, a nivel sonoro, contamos con una referencia como Diego Navarro que viene de Tenerife y es un compositor de bandas sonoras impresionante».
Festival Internacional de Cine Medioambiental
También es director del Festival Internacional de Cine Medioambiental de Canarias. ¿De dónde surge la idea? «Es el primer certamen de cine de carácter medioambiental que se hace en el Mundo. Yo tuve el honor, en 2008, de empezar a dirigirlo en el Puerto de la Cruz. Después se retomó en Garachico, que es un lugar que es ideal ya que los eventos así, cuando se hacen en núcleos más pequeños, se convierten en mágicos porque todo el pueblo lo vive. Este año no hemos podido realizarlo en el mes de mayo, pero lo tenemos previsto para el mes de octubre, si las condiciones se dan».
En caso de que la situación no permita realizarlo este año de forma presencial, ¿piensan en alguna alternativa virtual? «Casi todos los festivales han empezado a hacer esa parte online pero no están teniendo muy buenos resultados si se compara con las estadísticas del público que acuden a un evento de cine a verlo. Es verdad que hay una gran demanda por internet y es difícil que la gente dedique su tiempo a meterse en un festival a ver las películas así. Entonces no sabemos si nos merece la pena. Lo que sí estamos pensando es generar acciones que podamos realizar».
Hace poco el director del Festival de Cannes hablaba de que un festival de cine virtual no es un festival de cine y comparaba a las plataformas virtuales con la televisión. ¿Usted comparte esta opinión? «Totalmente. Por eso prefiero proyectar para quince o veinte personas del pueblo que no hacerlo de manera digital, porque al final sí, es como si estuvieras viendo la tele. Aunque es verdad que entiendo que algunos lo deban hacer teniendo en cuenta que se une un gran problema y es que los empleados que han estado trabajando un año entero en ese evento, si luego no genera no podrán cobrar. Pero nosotros preferimos lograr algo más pequeño, de forma directa y que el público disfrute de él».
¿Cómo ve la situación del cine canario a día de hoy? «Yo creo que está pasando un gran momento. Hay tres o cuatro productoras que marcan unos estándares muy altos con sus producciones que, como te decía antes, llegan a certámenes importantes, principalmente en el documental. El cine canario no existe como tal, pero estamos en una buena época en el documental y en el cortometraje, y yo creo que eso se va notando cada vez más y que Canarias puede situarse entre las comunidades más punteras de cine de España».
«En las Islas teníamos un déficit en formación»
¿Opina que la creación del Instituto del Cine de Canarias y de otras propuestas de formación que se han lanzado sobre todo en los últimos años ha aumentado el número de interesados en promover producciones desde las islas? «Todo lo que se amplíe en el ámbito de la formación yo creo que es muy importante porque aquí teníamos un déficit en eso. Ahora, al abrirse diferentes espacios donde la gente sea capaz de formarse y especializarse lógicamente va generando que hayan cada vez más personas trabajando en el cine».
La desescalada ya ha abierto la posibilidad de retomar los rodajes que habían quedado paralizados. ¿Piensa que es posible mantenerlos respetando las medidas de seguridad? «Yo creo que es un poco imposible en un rodaje. ¿Cómo le dices a los actores y actrices que deben guardar la distancia? ¿O cómo le comentas al director de fotografía que debe acercarse al personaje? Se pueden hacer algunas cosas, dentro de las restricciones más básicas, pero es un poco complejo».
Dentro de la propia productora de Tinglado Film, ¿hay algún proyecto que se haya visto perjudicado por la situación actual? «Estábamos con un corto que lo grabábamos en abril en el municipio de Buenavista del Norte y se suspendió. Por suerte en la mayoría de los que se pospusieron en la comunidad y que tienen algún tipo de colaboración con la administración pública, bien sea del Gobierno de Canarias o del Cabildo de Tenerife, se ha logrado consensuar que los límites para terminar los trabajos y para entregar se amplían. En general estamos esperando a saber algo más y a ver un poco que se mejoren las condiciones para retomar los rodajes».